“Nos tenía podridos, siempre choreándole a la gente que lo conocía. Ni se tomaba el trabajo de hacer 20 cuadras para robar”, contó un vecino de Villa Banana, haciendo referencia a un muchacho de 21 años que fue asesinado ayer por la tarde. El joven fue perseguido por dos personas por uno de los pasillos de la barriada y ultimado de un tiro por la espalda, mientras intentaba escapar. Al cierre de esta edición los pesquisas no contaban con sospechosos por el caso.
Según los habitantes de villa Banana, un asentamiento irregular vecino al Distrito Oeste, la suerte de Marcos Vallejos, de 21 años, estaba cantada desde hace rato. Es que el fallecido no contaba con mucho cariño entre los vecinos, quienes lo acusan de ser “un sacado que no respetaba nada”. Incluso relataron que sus propios padres estaban resignados a aceptar el final anunciado del joven.
De acuerdo con los datos aportados por los uniformados que trabajaban ayer por la tarde en la escena del crimen, Marcos murió en la casa de una vecina, un pequeño ranchito ubicado en Gaboto y las vías del tren. Pero no fue ahí donde lo atacaron.
Según voceros de la Unidad Regional II, el joven fue mal herido por dos personas que se movilizaban en una moto de baja cilindrada. La víctima caminaba por las vías férreas, a la altura de Rueda con dirección norte–sur, cuando fue sorprendida por los agresores, quienes comenzaron a perseguirla y le propiciaron un tiro por la espalda que le ingresó por debajo de las costillas y le salió por el abdomen.
Marcos caminó malherido hasta la casa de su vecina, quien lo protegió cuando sus agresores quisieron rematarlo. Sin embargo, el joven no logró sobrevivir a la balacera y falleció momentos después, señalaron voceros del caso.
“Marcos robaba siempre con otro pibe, Matías. Incluso hicieron cerrar una heladería de la zona de todas las veces que le afanaron. El loco no se tomaba el trabajo de cambiar de barrio, le afanaba a cualquiera”, contó un comerciante del lugar al ser entrevistado por El Ciudadano.
Vela y altar
Ayer por la tarde, mientras personal de Policía Científica trabajaba en la casilla donde murió Vallejos, una vela ardía en un pequeño altar construido en honor a otro chico asesinado, quien se topó con la muerte en ese mismo lugar.
Se trata de Brian Moyano, de 16 años, a quien hirieron de gravedad en la puerta del mencionado rancho de Gaboto y las vías, el pasado 28 de junio. Aquel día el chico tuvo una discusión con unos muchachos, quienes le dieron un tiro en la cabeza. Brian llegó a ser trasladado al Hospital de Emergencias, pero murió luego de algunas horas de estar internado.
