Matías «El Morocha» Cerón fue un delincuente y asesino que mató a por lo menos seis personas y se convirtió así en el asesino más joven y el hombre más buscado de Mendoza, donde encontró la muerte cuando fue baleado por la Policía tras escapar de una escena de crimen y tomar a una joven como rehén.
Los investigadores creen que este múltiple homicida pudo haber matado a unas 16 víctimas de sus robos, pero no se pudo comprobar.
Fue abatido por la Policía cuando tenía 18 años en 2003, pero su accionar delictivo se dio entre 2000 y ese año, por lo que era menor de edad cuando arrancó con los robos y los crímenes.
«El Morocha», recibió ese apodo luego de escapar de los uniformados que lo buscaban disfrazado de mujer, usaba una pistola calibre 9 milímetros para asaltar y matar gente.
Los robos y los asesinatos se produjeron en el Barrio San Martín, donde él vivía y donde ya se había convertido en la persona más buscada por los efectivos policiales.
El 24 de febrero de 2001 los uniformados que buscaban al «Morocha» lograron reducirlo gracias al accionar de un francotirador que le disparó, lo hirió, lo redujo y le quitó su arma.
Parecía que ese sería el final de Cerón, pero finalmente eso ocurrió en 2003 cuando Cerón estaba atrincherado en una casa ubicada en la calle Doctor Moreno de la ciudad mendocina de Las Heras. Allí tenía a una joven como rehén, pero sobre esto hay dos versiones distintas.
La primera, que fue la que más circuló hace 20 años, indicó que había ingresado a esa vivienda con fines de robo en horas de la madrugada y que tomó como rehén a la chica cuando fue descubierto por los demás habitantes.
La segunda dio cuenta de que Cerón era novio de la joven y que mientras dormía con ella fue sorprendido por policías que lo buscaban intensamente, por lo que al verse rodeado, la tomó en cautiverio.
Hubo largas negociaciones para que «El Morocha» liberara a la víctima y se entregara, pero fue en vano.
El delincuente al verse rodeado por los uniformados tomó a la chica del cuello con su brazo izquierdo y con el derecho le puso el arma en la cabeza. Asimismo, amenazaba con hacer explotar una granada que llevaba encima si la Policía no le abría paso.
La madre fue convocada para convencerlo de que dejara a la víctima y se entregara, pero no logró convencerlo.
Lo mismo ocurrió con el abuelo materno, quien tampoco pudo revertir la situación y se fue llorando de bronca en bicicleta como sabiendo el final que le esperaba a su nieto.
Cerón llevaba cinco horas con la chica como rehén y siempre tomada del cuello al tiempo que le apuntaba con un arma de fuego.
Un francotirador finalmente le dio un balazo en la ingle que fue certero.
La familia del «Morocha» tenían peligrosos antecedentes delictivos y de hecho uno de ellos murió después de su asesinato.
Miguel Cerón, de entonces 42 años, fue detenido en octubre de 2012 con cinco armas de fuego en su poder y tiene antecedentes por robo, lesiones y resistencia a la autoridad.
Luis Alberto Cerón, de 36, fue baleado por un policía en 2005 en el barrio Cerro Arco de Las Heras, donde habría protagonizado un asalto. Recibió dos impactos en la zona abdominal que lo dejaron al borde de la muerte y en 2007 fue condenado a seis años y ocho meses de cárcel por robo.
En tanto, el 6 de octubre de 2019, Marcelo Adrián Cerón Silva, de 41 años y hermano del «Morocha, fue asesinado en el barrio San Martín.