El cotejo ante Lanús del próximo domingo presenta un gran desafío para Juan Pablo Vojvoda. Más allá de la necesidad de sumar puntos para intentar mantenerse entre los cinco mejores de la tabla y estar en zona de Copa Libertadores, el dilema del DT será cómo armar el equipo a partir de suspensiones y lesiones.
Vojvoda no podrá contar con Mauro Formica, Seba Domínguez y Jacobo Mansilla, suspendidos; y además deberá esperar por la evolución física de Facundo Quignon, Joel Amoroso y José San Román.
Pero la previa del cotejo ante los salteños le abrió un problema más grave: Maxi Rodríguez. El delantero tuvo una molestia en el isquiotibial derecho y encendió la alarma.
“No vamos a contar con Formica, Domínguez y Maxi”, deslizó Vojvoda en el vestuario tras el triunfo ante Central Norte. Y si bien después ‘corrigió’ al decir que “con Maxi siempre hay que esperar hasta último momento”, no hay dudas que la sensación del DT no era la mejor.
“Sebastián Domínguez (esguince de rodilla leve) y Maxi Rodríguez (sobrecarga muscular) serán evaluados en la semana”, afirmó un parte médico oficial de este lunes que no clarificó demasiado. Aunque las fuentes consultadas aseguran que llegará “muy justo” al partido con Lanús.
Por otra parte, Facundo Quignon, quien tiene el alta médica desde la semana pasada, sintió molestias en el tobillo y por eso no estuvo con Central Norte, pero Vojvoda lo piensa como alternativa para enfrentar al Granate.
Distinto es el caso de Amoroso y San Román, quienes esta semana podrían sumarse al grupo, pero con pocas chances de estar disponibles para el partido del domingo.
La Lepra arrancará este martes por la mañana la semana de trabajo y en la cabeza del entrenador empezarán a rondar las alternativas para cubrir las ausencias. Fabricio Formiliano sería la opción de Domínguez, Víctor Figueroa ocuparía el lugar del Gato y Eugenio Isnaldo podría ser alternativa de Maxi. Y si llega Quignon, dejaría su lugar el juvenil Braian Rivero.
Por ahora especulaciones que se tejen a partir de un Vojvoda más allá de darle la chance a algunos juveniles como Valenzuela o Elías, considera que para estos partidos no hay que dejar de lado a aquellos jugadores más experimentados que llevaron al equipo a los primeros lugares de la tabla.
El domingo va a las 14
Este lunes AFA definió los horarios del fin de semana y finalmente la Lepra recibirá a Lanús el domingo a las 14, en el Coloso y a puertas cerradas, ya que Newell’s debe cumplir una fecha más de sanción por los incidentes del Clásico. Y el cotejo ante Belgrano en Córdoba se jugará el jueves 22.
“Me encantaría seguir”
Milton Valenzuela se dio el gusto de jugar un partido completo con la casaca rojinegra y aprovechó su chance. El lateral izquierdo, que hace algunas semanas parecía desterrado del Parque a partir de una transferencia poco clara, encontró el apoyo de Juan Pablo Vojvoda y ahora quiere quedarse.
“Pasaron muchas cosas en poco tiempo y me aconsejaron no mirar más allá del presente y es lo que hice. Me enfoqué en el Mundial Sub 20 y ahora al regreso esperé que me dijeran si me iba o tenía alguna chance”, destacó el juvenil, que jugó su segundo partido con la casaca leprosa anteanoche en Santa Fe ante Central Norte.
A la hora de analizar esta chance que tuvo de ser titular, Valenzuela confió que “hubo nervios”. “Lo viví con mucha ansiedad. Tenía muchas ganas de jugar, pero hasta salir a la cancha estaba bastante nervioso”, afirmó.
“Me sentí cómodo. Hice lo que me pidió el entrenador. Los experimentados nos simplifican las cosas con su apoyo. Nos sacan presión. Así es más fácil”, agregó.
Newell’s vendió el 60 por ciento del defensor a un grupo inversor español en 750 mil euros, pero la plata aún no llegó y en el Parque analizan si la operación se mantiene o no.
La realidad es que la tesorería leprosa contaba con ese dinero para saldar sueldos atrasados e incluso el juez Fabián Bellizia aprobó la transferencia. Y si bien la operación nunca fue muy clara, ya que no se sabía a ciencia cierta en qué club iba a jugar el marcador de punta zurdo, el aval judicial fue motivo suficiente para darle curso.
Pero con la salida de Osella, el juvenil lateral ahora no ve con buenos ojos irse, y desde su entorno afirman que se va a quedar, más allá de que aún no hubo ninguna charla con la dirigencia leprosa.
“No tuve ninguna novedad desde la semana pasada que volví de Corea. No me llamaron por novedades de ese tema. Yo trato de vivir el presente y dar lo mejor. Me encantaría seguir en el club si tengo chances de jugar”, manifestó.
Sobre las pocas chances que tuvo con Diego Osella, el juvenil defensor comentó: “Creo que el equipo estaba bien, iba segundo y cerca de entrar a la Copa. Por eso el entrenador no quiere tocarlo. No me sorprendió y por eso analicé irme cuando apareció la oferta”.