Un grupo de Médicos Autoconvocados de Rosario se movilizó este viernes con una caravana de autos y con un bocinazo en reclamo de mejores condiciones laborales. «Basta de acoso, basta de precarización y reconocimiento profesional», fueron las principales demandas. Además, se sumó el pedido de los equipos necesarios para protegerse del contagio de Covid-19. Desde el Sindicato de Médicos de la República Argentina (Amra) seccional Santa Fe se sumaron a la movilización. Esta semana, médicos cordobeses se movilizaron en sus autos para pedir que se los deje de «criminalizar», luego de que imputaran a dos médicos que trabajaban en un geriátrico de la localidad de Saldán, donde se produjo un brote de coronavirus hace dos meses.
El punto de partida de la movilización fue el Colegio de Médicos (de Pellegrini y España) y siguió hasta el Monumento a la Bandera donde reclamaron por salarios, mejores condiciones laborales y respeto por su trabajo en el contexto de la pandemia de coronavirus.
«Necesitamos visibilizar nuestra problemática para que se nos reconozca profesionalmente. También necesitamos acompañamiento social y que la salud deje de ser una empresa o un bien económico. Somos personal esencial», explicaron desde el grupo de profesionales de la salud.
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Según explicaron los médicos, no sólo son víctimas de agresiones físicas, verbales y psicológicas por parte de la población sino que además, se suma la discriminación por parte de algunos vecinos por estar afectados a la atención del Covid-19. Todo por un magro salario y una baja remuneración.
«La problemática es muy compleja. No nos sentimos representados siendo que la problemática sanitaria es fundamental. Siempre pensamos en el otro, podemos enfermarnos, contagiar a nuestras familias y hasta morir», advirtieron desde el grupo de Médicos Autoconvocados.
A partir de una encuesta que respondieron 290 profesionales, registraron que sólo el 70 por ciento disponía del equipo de protección para trabajar en condiciones sanitarias por el Covid-19, mientras el 30 restante se lo había autoabastecido.
«Nadie controla. Nos obligan a trabajar con barbijos quirúrgicos en un consultorio externo, pero nos dan un barbijo de fiselina que no corresponde, y además se cuadriplicó el precio», lamentaron.
Los profesionales enviaron un petitorio al Colegio de Médicos de la 2° Circunscripción. Uno de lo párrafos decía: «Creemos que el escenario actual nos exige que estemos a la altura de las circunstancias como profesionales de la salud, trabajando concatenados independientemente del sitio de trabajo, especialidad o el nivel de atención. Es tiempo de repensar el valor de la vida, la vocación y el reconocimiento de la profesión no sólo con aplausos sino con recursos».
Por eso, los profesionales autoconvocados piden reconocimiento profesional, derechos como trabajadores, equipos de protección suficientes y de calidad, salud para todos, salud como derecho, gestión en salud y relación de dependencia.
Amra estuvo presente
A la iniciativa del bocinazo se sumó el Sindicato de Médicos de la República Argentina (Amra) seccional Santa Fe. «Nos unimos al grupo porque nuestros delegados nos pidieron que hiciéramos una movida. Por eso lo hicimos llegar a toda la provincia como por ejemplo, Santa Fe Capital, Venado Tuerto, Rafaela, Vera y Reconquista», dijo a El Ciudadano, Sandra Maiorana, secretaria adjunta de Amra.
Maiorana remarcó que el contexto de la pandemia dejó al descubierto los motivos por los que el sector viene luchando desde hace muchos años. «El virus no discrimina, es como las balas. Si siguen jodiendo no van a tener quién los atienda. El hartazgo es lo que generó que saliéramos a la calle, antes no movilizabas a un médico a ninguna parte», señaló.
Desde Amra indicaron que por parte del Estado están siendo denigrados y apuntaron contra el Ministro de Salud de la Nación, Ginés González García, que aseguran «discriminó a quienes trabajan en instituciones sin internación al excluirlos del bono mensual de 5 mil pesos».
La secretaria adjunta de Amra advirtió que el estrés de los trabajadores de la salud está creando segundas víctimas: «La carga emocional que soportan los profesionales que atienden a pacientes con Covid-19 llegó hasta el suicidio en otros países. ¿En qué condiciones anímicas vamos a entrar en el pico de la pandemia? Muchos profesionales ya se están cuestionando para qué estudiaron medicina». Y cerró: «La población se tiene que cuidar para que los profesionales de la salud los podamos cuidar».
Siprus denuncia descuentos
El Sindicato de Profesionales Universitarios de la Salud (Siprus – Fesprosa) mostró su preocupación y, a través de un comunicado, expresó su repudio a la amenaza de descuentos por parte del gobierno provincial a raíz del paro de la semana pasada. “Somos quienes estamos al frente de la lucha contra la pandemia, hay quienes no cobran hace ocho meses, los salarios generales están congelados, no se pagan adicionales correspondientemente y encima nos amenazan con reducirnos el salario por protestar. Es una actitud lamentable”, expresaron desde el sindicato.
El gran inconveniente, según el sector, es que no existen diálogos abiertos, la paritaria fue clausurada de facto por el gobierno provincial y existe gran cantidad de reclamos sin respuestas. Ante esto, Siprus votará hasta el lunes diferentes medidas de cara a las próximas dos semanas.
“Que en medio de esta pandemia los que estamos poniendo el cuerpo a la crisis sanitaria recibamos esta respuesta ante nuestros reclamos resulta lamentable. Desde que asumió la nueva gestión no hemos sido recibidos por el Ministro de Salud. No hay respuesta a la mayoría de los problemas. A diferencia de otras jurisdicciones, no hemos sido convocados a ninguna instancia de discusión de la emergencia sanitaria. El ministerio se sentó más veces con los dueños de la salud privada que con sus propios trabajadores”, detallaron referentes del sindicato.
Y cerraron: «Por más que busquen callarnos, no van a lograrlo. Tenemos el derecho constitucional de reclamar lo que nos corresponde. En la provincia hay recursos. Solo hay que tener decisión política para buscarlos. Somos conscientes de que además de nuestros derechos está en juego la salud pública y justamente por eso, planteamos medidas para hacernos escuchar”.
