El ministro de Salud Mario Drisun se reunió ayer por primera vez en Rosario con dirigentes de la Asociación de Médicos de la República Argentina (Amra), entidad que nuclea a profesionales de la salud de la provincia, para abordar pautas salariales de cara a la próxima paritaria a iniciarse el 6 de febrero. También se plantearon ajustes de horas de trabajo y el pase a planta de 800 empleados que perciben sus ingresos por contrato o como monotributistas. Además, discutieron sobre el funcionamiento sanitario en el territorio santafesino, la seguridad de los médicos y la violencia institucional.
“Se habló de trabajar en conjunto en todos los aspectos que tienen injerencia en la salud, que hacen también al trabajo médico. Consideramos que nuestro lugar de trabajo es donde estamos la mayor parte de nuestra vida y las decisiones que se toman en salud inciden en forma directa sobre los trabajadores, no sólo sobre la población”, dijo Sandra Maiorana, secretaria de Amra.
La gremialista consideró que “el diálogo se da siempre poniendo en primer lugar la función que solamente nosotros podemos cumplir como sindicato y que es el defender las condiciones de trabajo y salariales”. De este modo, dijo que en paritarias pedirán “un 40 por ciento de aumento, de bolsillo y en blanco porque partimos de la base que el aumento anterior estuvo muy por debajo del costo de vida”. También indicó que reclamarán por la titularidad de 250 cargos de jefes que trabajan como tales pero no perciben el sueldo correspondiente, y contó que en 2013 presentaron un proyecto de ley sobre el tema pero que aún no tuvo tratamiento en la Legislatura.
Para el secretario general de Amra, Eduardo Taboada, “son fundamentales las condiciones laborales porque hacen que la satisfacción en el trabajo se traduzca en una buena atención y en una buena salud”.
“Si bien no podemos ser corporativos ciento por ciento, debemos defender las pautas salariales”, explicó.
Seguridad y violencia
Además de las cuestiones salariales los representantes de Amra hablaron sobre la seguridad de los médicos en sus ámbitos de trabajo.
“Es nuestra primera meta porque aunque se tenga un buen salario la integridad de los trabajadores es lo primero. Inclusive planteamos no solamente trabajar sobre la violencia externa sino también sobre la violencia institucional dentro de cada lugar”, sostuvo Maiorana.
“Es importante cómo actúan los médicos a la hora de pensar el dolor del otro. No es un tema menor cómo podemos orientar la organización de los efectores públicos con una actitud, no sólo de atender bien sino de cuidado, que no es lo mismo”, aseguró por su parte Drisun. Y consideró que “cuidado significa estar atentos a todos los momentos de las personas: desde cuando llegan a una guardia hasta el cuidar que estén sanos, que tengan todas la vacunas, o prevenir enfermedades por mala nutrición. Todas estas cosas las puede hacer el sistema de salud y en especial el médico, siempre que tenga sensibilidad”.