La Justicia de Córdoba condenó hoy al represor Luciano Benjamín Menéndez a la pena de «prisión perpetua» en la megacausa La Perla, por los crímenes cometidos en ese centro clandestino durante la dictadura militar.
El Tribunal Oral Federal 1 (TOF1) consideró a Menéndez como autor y coautor de crímenes por privación ilegitima de la libertad, tormentos y desaparición forzada de personas seguida de muerte, entre otros delitos cometidos contra centenares de «perseguidos políticos».
El octogenario exjerarca de La Perla escuchó pasivo una nueva condena a prisión perpetua.
Los excarapintadas Héctor Pedro Vergez y Ernesto Barreiro, también fueron condenados a la misma pena por delitos similares.
Se trata de la primera condena que recibe Barreiro por su actuación durante la represión ilegal.
Barreiro estaba imputado por 518 delitos: 228 privaciones ilegitimas de la libertad agravadas, 211 imposiciones de tormentos agravadas, 65 homicidios calificados, 13 imposiciones de tormentos seguidos de muerte y el robo de un menor de 10 años.
Además, los jueces sentenciaron a la mayor pena a los represores Arnoldo «Chubi» José López, Jorge González Navarro, Jorge Eduardo Gorleri, Jorge Acosta, Héctor Hugo Chilo, Luis Martela, Luis Gustavo Diedrichs, Alberto Luis Choux.
La misma condena recibieron Oreste Padován, José Hugo Herrera, Miguel Ángel Lemoine, Juan Eusebio Vega, Ricardo Lardone, Emilio Morard, Héctor Romero y Carlos Alberto Díaz.
Por su lado, a José Andrés Tófalo lo sentenciaron a 14 años de prisión, a Wenceslao Claro le correspondieron 5 años de pena.
Carlos Monti fue sentenciado a dos años y seis meses, mientras que se absolvió a Ángel Corvalán.
La lectura de las sentencias fue presenciada por el gobernador cordobés, Juan Schiaretti, así como la presidenta de Abuelas de Plaza de Mayo, Estela Carlotto, entre otros funcionarios y dirigentes.
En el interior del Tribunal se encontraba la activista Cecilia Pando, que exhibió carteles reivindicando la represión y buscó protagonizar una protesta al señalar que le juicio era «un circo».
En tanto, afuera del edificio se desarrollo una multitudinaria movilización convocada por organismos de derechos Humanos.
La megacausa «La Perla», que investiga los delitos de lesa humanidad perpetrados en cuatro centros clandestinos de detención de Córdoba, llegó así a su fin.
La investigación comenzó en diciembre de 2012 con más de 40 imputados y cuatro años después, por acumulación de causas, llegó a sumar 52, la mayor cantidad en un juicio de estas características, en el que cerca de 600 personas han dado su testimonio en más de mil horas de audiencias.
La causa estuvo integrada por 22 expedientes por delitos de lesa humanidad cometidos entre marzo de 1975 y 1979 en los centros clandestinos de detención, tortura y exterminio de Córdoba conocidos como «La Perla» (el mayor del interior de la Argentina durante la última dictadura), «Malagueño o Perla chica», «Campo La Ribera» y «D2».
Además de los secuestros, torturas y asesinatos contra más de 700 víctimas, 311 de ellas aún desaparecidas, se destaca el hecho
de que por primera vez se juzgó en esa provincia la apropiación de bebés: se trata del secuestro y posterior desaparición de Silvina Mónica Parodi de Orozco, embarazada de seis meses y medio, y su marido, Daniel Francisco Orozco, como así también la sustracción del bebé de Silvina nacido en cautiverio.