«Hubo una imagen que muestra el profundo nivel de misoginia y sexismo en la RFEF con Luis Rubiales (presidente del organismo) agarrándose la entrepierna. ¿En qué mundo al revés vivimos? En un escenario en el que deberías estar celebrando el título, Jenni Hermoso fue físicamente acosada por esa persona», dijo Rapinoe, de 38 años al medio estadounidense The Atlantic.
El escándalo estalló tras la final del mundial femenino celebrado en Australia y Nueva Zelanda, ganado por España en la final ante Inglaterra el pasado domingo, cuando Rubiales le dio un beso en los labios a Hermoso, jugadora del equipo ibérico, en la premiación y sin su consentimiento.
Como si fuera poco, Rubiales se tomó los genitales al gritar el gol de de España, convertido por Olga Carmona y que estableció el 1-0 definitivo, pese a que tenía a su lado a la Reina de España.
«Lo ocurrido me hizo pensar en todo lo que tenemos que aguantar. Piensen en el peso que tuvo que soportar la selección española. Algunas jugadoras que se plantaron el año pasado siguen sin estar en el equipo» señaló Rapinoe, quien jugó su último mundial.