La defensa de la pelota detenida es uno de los aspectos a mejorar por Rosario Central de cara a lo que viene. En la última Superliga, los auriazules recibieron 29 goles en contra de su valla en 23 encuentros. Y 7 de ellos llegaron a partir de lanzamientos de pelota detenida en forma de centro, ya sea de forma directa o en una segunda jugada. Pero lo llamativo del caso es que 4 de esos 7 tantos se dieron en los 7 partidos que se jugaron en este 2020.
Para contrarrestar el peligro que pudieran generar este tipo de ataques, el canalla plantea una marcación zonal. Y flota la sensación de que los rivales ya tomaron nota de los posibles puntos débiles de este sistema. Además, el equipo de Diego Cocca perdió un par de habituales titulares que estaban adaptados a esta forma de defender, como Miguel Barbieri y Nahuel Molina. Y sus reemplazantes parecen no estar adaptados aún al sistema.
El que no dudó en reconocer esta falencia fue Fabián Rinaudo. “En nuestro fútbol no se acostumbra mucho a marcar en zona. Muy pocos equipos lo hacemos. Creo que en estos últimos partidos nos costó un poco más defender la pelota detenida porque llegó gente nueva, y se tiene que adaptar a esta forma”, explicó el volante auriazul.
Y aceptó también que “hay que mejorar ese punto claramente y nosotros tenemos que ayudar a los que llegaron a que se adapten rápidamente”. “Nos hicieron varios goles de pelota parada en estos últimos partidos, y no es la idea; es la forma de marcación que propone el técnico, y nos tenemos que adaptar ya que el año pasado nos habían marcado pocos goles por esa vía”, agregó Fito.
Parte de los dichos de Rinaudo se corroboran con los hechos. En la primera atapa del torneo, la que se disputó en el segundo semestre de 2019, Central recibió sólo tres goles a partir de la pelota detenida en 16 encuentros.
El primer gol en contra de la última Superliga por esa vía llegó en la fecha 3, en el empate en dos tantos como visitante ante San Lorenzo. Y lo marcó Bruno Pittón peinando el balón en el primer palo tras un tiro libre ejecutado desde de la izquierda.
El segundo fue en la fecha 6, en el empate Clásico en Arroyito. Y lo anotó Cristian Lema conectando de cabeza en el segundo palo un tiro de esquina lanzado desde la izquierda.
Y el tercero se dio en la fecha 12, en el triunfo auriazul sobre Godoy Cruz por 5 a 2 en el Gigante. El verdugo canalla fue Tomás Badaloni, que empujó en la línea la pelota después de que un compañero peinara en el primer palo en córner ejecutado desde la izquierda.
Pero en 2020 aparecieron algunos desajustes y distracciones en la marcación zonal. Y llegaron 4 goles desde la pelota parada en apenas 7 encuentros jugados. Además, todos esos tantos se dieron en condición de visitante.
En la fecha 18, el primer gol del triunfo de Independiente por 5 a 0 llegó a través de Alexander Barboza, quien ganó un rebote en el segundo palo después de un córner corto desde la derecha.
En la jornada 21, también Defensa y Justicia abrió su victoria por 3 a 0 con un gol a la salida de un córner. Juan Manuel Lucero convirtió ingresando por el segundo palo después de que un compañero peinara el balón en el primero tras un córner lanzado desde la derecha.
Los últimos dos fueron en el cierre de la Superliga, cuando por la fecha 23 Central cayó ante Argentinos por 2 a 1. El primero fue de Carlos Quintana que cabeceó al gol en el segundo palo tras un centro frontal de Torren, una jugada que se generó a partir de un rebote de un córner ejecutado desde la derecha. El segundo lo hizo Fausto Vera, de volea, tras capturar un despeje corto en el segundo palo, después de un córner lanzado desde la derecha.
Más allá de la situación, Joaquín Laso cree que hubo algo de mala suerte a la hora de defender la pelota detenida. Y que no están “lejos de hacerlo bien”. “Esto de marcar en zona es una forma de defender que ya había puesto en práctica con otros técnicos. Creo que en estos partidos tuvimos algo de mala suerte con algunos rebotes”, contó Laso.
Y añadió: “La verdad es que ganamos bastante de cabeza en las dos áreas, pero a veces la pelota quedó en la nuestra y nos hicieron goles. Creo que hay que seguir trabajando y mejorando esta forma. Cambiar ahora sería una forma de mostrar que vas perdiendo el rumbo. Además, no me parece que estemos muy lejos de hacerlo bien”.