La ministra de Educación, Letizia Mengarelli, sostuvo hoy que “el gobierno está abierto al diálogo y sostiene la propuesta salarial realizada que, tanto en la primera como en la segunda oportunidad, fue la mejor del país”. Lo dijo en referencia al ofrecimiento de 4.000 pesos desde marzo para el maestro de grado que recién se inicia y de 4.067 pesos en julio.
“Esperamos que el gremio docente se siente de nuevo a conversar, que así lo proponga. Nosotros fuimos con distintas propuestas a la mesa paritaria y la respuesta ha sido siempre el paro. Cuando convocamos a la primera reunión y se hizo el ofrecimiento, la respuesta fueron tres semanas de paro de 48 horas”, recordó Mengarelli.
“De todos modos volvimos a convocar a una reunión paritaria para poder analizar internamente la composición de los salarios y de la escala a fin de que la propuesta pueda ser aceptable para los docentes. En esa ocasión arribamos a una propuesta que se consideró superadora, una propuesta que, al igual que en la primera oportunidad, siguió siendo la mejor del país y que sometida otra vez a consideración, fue rechazada y nuevamente tenemos paros”, continuó.
“Esperamos que recapaciten, que se hagan responsables de las medidas porque cuando alguien toma una decisión y la toma según ciertas reglas tiene que hacerse responsable de lo que decide o de lo que deja decidir”, sostuvo Mengarelli, quien ratificó que “los días que no se trabajan, no se abonan”.
Al respecto, la ministra añadió: “Si nos remontamos a varios años atrás, cuando los salarios eran fijados unilateralmente por el gobierno, la única manera de una entidad gremial de hacerse escuchar era convocar a un paro de sus afiliados y no afiliados, y de ese modo de hacer sentir el rechazo a una decisión unilateral. Desde que existe la ley de paritarias hay un modo de sostener esta conversación entre pares y, por lo tanto, hay que sostenerlo según esas reglas de juego. Hoy, en esta conversación aparecemos como desiguales, con respuestas del pasado a modos de tramitar estas diferencias que son del presente”.
“Desde el ministerio se ha pedido que todas las escuelas estén abiertas para los niños y los docentes que quieran trabajar porque eso debe garantizarse. Las escuelas están con sus puertas abiertas. Tenemos que aprender que este contexto es muy diferente; ya no estamos hablando de pésimas condiciones de trabajo y de un salario deplorable. Estamos hablando de un tiempo sostenido de cuatro años de mejora”, concluyó.