El 56,6% de los puestos de trabajo en Argentina durante 2022 estuvieron ocupados por varones, mientras que el porcentaje restante fue acaparado por mujeres, aunque se dio la particularidad de que hacia el interior de este universo se contabilizaron mayor cantidad de personas asalariadas en condición registrada que entre los hombres.
Los datos se desprenden del último informe de Indec sobre remuneración al trabajo, en el que distinguieron por sexo y edad. La mayor participación de varones se da en todas las categorías ocupacionales, aunque es más alta en los no asalariados (64,5%).
El 48,1% de los varones son asalariados registrados; el 29,3% no asalariados y el 22,6% son asalariados no registrados. Por su parte, sobre el total de los puestos de trabajo entre mujeres, 52,3% son asalariadas registradas; 26,8%, asalariadas no registradas; y 21,0%, no asalariadas.
La remuneración al trabajo asalariado es mayor en varones, tanto en los trabajadores asalariados registrados como no registrados y la mayor proporción de la remuneración al trabajo asalariado se da en el grupo de 30 a 49 años, y le sigue en importancia relativa el grupo de 50 años y más.
A la hora de medir el tiempo, los varones trabajan mayor cantidad de horas anuales que las mujeres en todas las categorías ocupacionales. Cuando el análisis se realiza por puesto de trabajo también se observan valores superiores en los varones, aunque las diferencias se reducen. La remuneración media por puesto y por hora trabajada es mayor en los varones en las dos categorías ocupacionales.
La brecha de género en la remuneración promedio por hora trabajada es 9,1 en los asalariados registrados y 15,3 en los asalariados no registrados.
Sector por sector
Se pueden identificar sectores de la actividad económica con fuerte proporción de mano de obra masculina: Agricultura, ganadería, caza y silvicultura y Pesca; Explotación de minas y canteras; Industria manufacturera; Electricidad, gas y agua; Construcción, Comercio al por mayor y al por menor y reparación de vehículos automotores; Servicios de transporte, de almacenamiento y de comunicaciones; Actividades inmobiliarias, empresariales y de alquiler; y Otras actividades de servicios comunitarias, sociales y personales n.c.p.
En otros sectores, la participación según sexo de la población es más equilibrada: Servicios de hotelería y restaurantes; Intermediación financiera y otros servicios financieros; y Administración pública, defensa y seguridad social obligatoria.
Otros sectores tienen mayor participación de mujeres: Enseñanza (pública y privada); Servicios sociales y de salud (públicos y privados); y Hogares privados que contratan servicio doméstico.