Lionel Messi, Gerardo Martino y Javier Mascherano pidieron sus deseos en el Muro de los Lamentos, en Jerusalén, durante la segunda y última jornada de una gira que el Barcelona realiza por Medio Oriente para acercar a israelíes y palestinos.
Con la cabeza cubierta con una kipá blanca, como marca la tradición del lugar, los integrantes de la delegación catalana cumplieron casi sin excepción con el ritual en uno de los íconos del judaísmo.
Según la agencia EFE, Mascherano introdujo casi medio brazo en una de las grietas del muro para depositar su nota con la petición.
«No voy a decir lo que he escrito, si no, no se cumplirá», respondió con humor el presidente del club, Sandro Rosell, al ser consultado sobre si la Liga de Campeones estaba entre sus deseos.
La visita al Muro se realizó bajo fuertes medidas de seguridad, destinadas sobre todo a impedir una avalancha de aficionados sobre las estrellas de Barcelona, el equipo que cuenta con más seguidores entre israelíes y palestinos.
Messi, escoltado en todo momento por agentes de seguridad, fue la figura que mayor atracción produjo en el lugar.
Después de la excursión, la delegación de Barcelona participó en un acto en la residencia oficial del presidente israelí, Shimon Peres, en el que se firmó una «declaración por la tolerancia» que formará parte del programa educativo en todos los colegios israelíes a partir del próximo año lectivo.
La delegación se desplazó luego a Tel Aviv para un encuentro con un grupo de niños enfermos de cáncer y, más tarde, celebrará un entrenamiento con menores en el estadio Bloomfield como último acto de su Tour de la Paz.
«Todos los jugadores que quieran irse pueden irse, todos menos Messi»
El astro argentino Lionel Messi no podría irse del Barça aunque quisiera y tiene más posibilidades de ayudar al nuevo fichaje brasileño Neymar que al revés, consideró el presidente del club, Sandro Rosell, en una entrevista publicada este domingo en la prensa española.
«Todos los jugadores que quieran irse pueden irse, todos menos Messi», aseguró el presidente Sandro Rosell al diario deportivo catalán Sport. Para llevárselo a otro club «deberían darle 250 millones a Leo para pagar la cláusula a la LFP (liga de fútbol profesional), más el 56% que debería pagar en impuestos. Esto serían unos 580 millones de euros», explicó.
Considerando que el argentino «sólo puede tener celos de sí mismo», Rosell aseguró que el recién llegado «Neymar necesitará tiempo» para adaptarse al club azulgrana.
«A día de hoy, Messi puede ayudar más a Neymar que al revés», estimó ante los temores de que la convivencia en el equipo de dos atacantes estrellas sea complicada.
«Dicho esto, Neymar puede ayudarle porque distraerá a defensas que permitan a Messi tener uno menos encima», explicó. «Si tenía cuatro, ahora puede tener tres», agregó.
En cuanto al fichaje del entrenador argentino Gerardo Martino, más conocido como Tata, Rosell aseguró que fue posible gracias al presidente de Paraguay, el multimillonario Horacio Cartes.
«Contacté con el Tata gracias al presidente de Paraguay porque años atrás había sido el vicepresidente deportivo de Libertad y de la Federación paraguaya y siempre había estado con el Tata», explicó.
«Le llamé: Presidente, quiero hablar con el Tata. Deme su teléfono, por favor», aseguró.
Tras hablar con el técnico argentino, Rosell lo puso en contacto con el director deportivo del Barcelona, Andoni Zubizarreta.
«Andoni habló con todos sus contactos del mundo y se dió cuenta de que este hombre tiene más ADN Barça que muchos de los que están en el Barça», aseguró el presidente del club catalán.