El ex alcalde de la localidad mexicana de San Blas y candidato independiente a volver a ese cargo, Hilario Ramírez, reconoció que cuando ocupó el Ejecutivo le robó «un poquito» a las arcas locales, en una maniobra que llamó «una rasuradita», porque el municipio es «bien pobre».
«Me han criticado mucho porque dicen que a mí me gusta el dinero, pero ¿a quién no le gusta? A todo el mundo», señaló Ramírez en un acto llevado a cabo durante el fin de semana.
Ramírez, que intenta volver a la alcaldía de San Blas, en el estado de Nayarit, fue más allá: «Sí le robé, sí le robé, poquito porque está bien pobre; le di una rasuradita, nomás una rasuradita», explicó.
«Pero lo que con esta mano me robaba, con esta (otra) mano se la daba a los pobres», añadió, y remarcó que le gusta trabajar y «ayudar al pueblo», reportó la agencia EFE.
El candidato llegó al cargo en el 2008 como hombre del conservador Partido Acción Nacional (PAN), y durante su mandato fue acusado de un supuesto desfalco de 20 millones de pesos (1,5 millones de dólares).
El 6 de julio los ciudadanos de Nayarit votarán para renovar la Legislatura local y designar a 20 alcaldes.
Pero en la mañana de hoy, Ramírez aclaró que las declaraciones hechas sobre que robó «poquito» al erario, se trataron de una broma, que hoy es utilizada por sus adversarios. “Todo fue una broma, no es cierto que he robado dinero de la alcaldía yo no me mantengo del erario, para eso trabajo, soy comerciante”, sostuvo.