Este martes (y como pasa hace años) Rosario amaneció otra vez cubierta por el humo generado por las quemas de pastizales en las islas entrerrianas sobre el río Paraná.
Mauro -como muchos ciudadanos- se levantó ayer por la mañana en su casa del barrio del Abasto tapado de humo y cenizas, y decidió tomar imágenes y videos desde su drone -que lo tiene con fines recreativos- para visibilizar una ciudad irrespirable.
Desde el aire no se vieron los edificios, ni las calles, ni los parques. Y eso permitió dar cuenta de la magnitud del desastre ambiental, que es del humedal y de la ciudad, del presente y para el futuro.
El Ciudadano fue el primer medio que difundió este martes las imágenes y videos que tomó Mauro y que luego fueron viralizadas en redes de todo el país.
“Estuve sacando fotos y haciendo videos desde el drone y lo compartí para visibilizar el problema que tenemos desde hace mucho tiempo. Mi esposa está embarazada de cinco meses y se le complica respirar, mi mamá tiene EPOC, una enfermedad pulmonar crónica, y mi hermana lucha contra una cáncer. Estamos muy preocupados. Me impactó ver las imágenes. Es terrible lo que estamos respirando”, contó el joven a El Ciudadano.
Las mediciones del impacto en la calidad del aire en Rosario, hechas por el Instituto de Física Rosario (FIR CONICET – UNR), arrojaron como resultado que el promedio PM2.5 de las últimas 24 horas (por ayer) fue de 75ugr/m3. Es decir, que supera cinco veces el límite máximo definido por la Organización Mundial de la Salud (OMS).
«Nací en Rosario y me encanta mi ciudad, pero cuando ves la magnitud del problema de las quemas en las islas nos preguntamos si está bien seguir viviendo acá. Se sabe que la situación del país es compleja y los incendios en el humedal están afectando a más de un millón de personas”, lamentó Mauro.
Y finalizó: “Mi aporte fue visibilizar lo que estamos respirando en Rosario. La solución no debería ser tan compleja y se debería poder hacer algo. El Estado tiene herramientas para solucionar este problema que no está envenenando el aire. Me impactó ver las imágenes. Nos provoca tristeza, impotencia y nos preocupa”.