El arquero de San Lorenzo, Pablo Migliore, rompió el silencio luego de ser excarcelado el jueves por la tarde y aseguró que a partir «no tengo más códigos, tengo principios». Además, aseguró que no habló de Maximiliano Mazzaro, pero que seguirá colaborando con la Justicia.
Migliore manifestó en diálogo con La Red que tiene una relación desde los 8 años con el número dos de la barra de Boca, pero que no lo ayudó en nada para que continúe prófugo de la Justicia. Además, aceptó que le pincharan todos los teléfonos para demostrar que no quiere tener nada que ver con el caso.
En cuanto a su estadía en la cárcel, el arquero desmintió que en algún momento se le haya pasado por la cabeza suicidarse, aunque admitió que estuvo muy bajoneado y que necesitará continuar viendo a un psicólogo. «En la cárcel soñaba con volver a estar con mis hijos y volver al arco de San Lorenzo», aseguró, antes de describir como eran sus días: «En la cárcel me levantaba a las 8: gimnasio, pesas, corría, boxeo, educación y a dormir».
En cuando a su futuro, aseguró que su deseo es continuar en San Lorenzo, donde tiene contrato hasta 2015. Sin embargo, dijo que no lo llamó ningún dirigente y que hará lo que sea mejor para la institución.
«Tiene las puertas abiertas»
El DT de San Lorenzo, Juan Antonio Pizzi, afirmó hoy que el arquero tiene es bienvenido para entrenarse en el club.
«Migliore, si así lo desea, tiene las puertas abiertas para hacer el entrenamiento. Nos gustaría que venga a entrenar con nosotros», señaló Pizzi en conferencia de prensa.
El ex arquero de Huracán, Boca Juniors y Racing no podrá atajar en San Lorenzo, donde tiene contrato hasta 2015, hasta el final del presente Torneo Final, pero su ciclo en el club de Boedo, que contrató a préstamo a Sebastián Torrico, proveniente de Godoy Cruz de Mendoza, estaría terminado.
Pizzi, de 44 años, indicó que Migliore cuenta con el «apoyo y predisposición» del cuerpo técnico y plantel, pero remarcó que no es «la persona indicada» para hablar sobre el futuro del futbolista en la institución.
«Me alegra mucho a nivel personal, del cuerpo técnico y del plantel, que esté en libertad porque pasó un momento difícil y le costará normalizar su vida», agregó Pizzi.
