El presidente Javier Milei opinó sobre la situación procesal de su antecesor Alberto Fernández, al que acusó de estar involucrado en hechos de corrupción y de haber ejercido violencia de género contra su ex pareja Fabiola Yañez, la denunciante.
A través de sus redes sociales, el mandatario publicó un texto que tituló “ordenando los hechos” en el que expuso cinco puntos que detallan las conductas que según él tuvo el referente peronista.
Para Milei, los episodios de corrupción se originaron tras la investigación abierta por el Ministerio de Capital Humano, a cargo de Sandra Pettovello, por la contratación irregular de seguros, y sostuvo que de eso devino además, las pruebas de violencia de género contra la ex primera dama.
“El caso involucra al expresidente Alberto Fernández, paladín del feminismo, golpeando a su mujer Fabiola Yañez”, resaltó el jefe de Estado y aclaró: “Esto NO quita que FY haya sido cómplice (en especial en pandemia) de muchas de las aberraciones del gobierno espantoso del kirchnerismo”.
En segundo lugar, explicó que de no haber “una pareja abierta” entre Fernández y Yáñez, el expresidente cometió “una traición” a la relación, pero aclaró que no deja de ser relativo al ámbito de lo privado.
Asimismo, denunció “contrataciones espurias con los fondos públicos” al subrayar que si “la tercera en discordia ha sido beneficiada con un contrato cuya contraparte final es el Estado, ello constituye prostitución”.
“El problema no radica en el acuerdo de partes en sí, si no que el problema radica en que las acciones de Alberto Fernández estarían siendo soportadas/pagadas por los impuestos pagados por los argentinos”, remarcó.
Tras las aclaraciones de Tamara Pettinato, a quien acusan de haber sido contratada por la administración de Unión por la Patria, el mandatario especificó: “No es argumento el ‘me paga una empresa privada’ cuando la empresa es fondeada por el Estado a tales fines, lo cual deriva en una asociación ilícita”.
Como reflexión final y a pesar del proceso judicial abierto, Milei sintetizó que Alberto Fernández está involucrado en episodios de “corrupción en los seguros”; y lo inculpó por haber ejercido “violencia de género” y de protagonizar una “asociación ilícita y tráfico de influencias usando al Estado para financiar los placeres extrafunción del expresidente”.
También denunció “el silencio cómplice de periodistas que recibían pauta del Estado”, y planteó que “todos estos hechos ocurrían mientras desde los medios nos explicaban que ellos eran los buenos y los que queremos una Argentina libre éramos los malos”.