A las 21 en lugar del mediodía y desde un atril dando la espalda a las autoridades de las dos Cámaras legislativas en lugar de en el estrado junto a ellas. Estética estadounidense del State of the Union message y búsqueda de repércusión televisiva en horario central. Apenas dos de las diferencias, respecto de anteriores ceremonias, que habrá durante la noche de este viernes en la apertura de las sesiones ordinarias del Congreso que encabezará el presidente Javier Milei. El mismo que definió el ámbito institucional deliberativo como un «nido de ratas» y, luego, presumió de poder prescindir del mismo para profundizar las «reformas» de su manual libertario para gobernar a fuerza de DNU.
En el Salón de Pasos Perdidos se dispuso al mediodía de este jueves un corredor exclusivo en cuyos vallados, de un extremo al otro, se colocaron extensas banderas argentinas. Por allí desfilará el jefe de Estado junto a la vicepresidenta Victoria Villarruel y la comitiva de interior en su paso desde el Salón Azul hasta el recinto. Los vallados en el exterior también estaban preparados la víspera del mensaje.
Dentro del semicírculo del recinto de Diputados, sobresalía el atril desde donde leerá su discurso el presidente. Lo volvieron a colocar debajo del estrado, porque el mueble de madera, con el escudo nacional en el frente, había sido guardado el jueves en una sala del subsuelo de la Cámara de Diputados luego de que se filtrara una imagen contra los deseos de la organización. El día siguiente lo repusieron, en medio del trajín de técnicos acomodando cables y cámaras dentro del recinto y en los palcos, para la transmisión televisiva obligatoria.
La suma de gestos de desprecio e insultos hacia la legitimidad del Congreso por parte de Milei deriva, de cara al acto, en un desafío para la oposición parlamentaria: los integrantes de los bloques de Unión por la Patria, por ejemplo, debatieron en una reunión cómo darle la bienvenida a Milei en el recinto y qué hacer en caso de nuevos agravios verbales del presidente. La postura mayoritaria es no caer en las provocaciones y así darle «letra» al ejército de posteadores de redes sociales de la Libertad Avanza, varios de ellos contratados desde el mismo Estado para ese trabajo.
Otra preocupación de algunos diputados opositores apunta a la posible disposición en los palcos de personajes hostiles vinculados al oficialismo. Hay antecedentes: el 31 de enero pasado, durante el debate de la ley ómnibus, un empresario militante libertario agredió verbalmente a la diputada del Frente de Izquierda Myriam Bregman y generó un caos en medio de los debates ya de por sí trabados por el oficialismo. El revuelo fue retirado del recinto por personal de seguridad, pero su aparente objetivo de ensuciar la sesión ya estaba consumado.
La apertura de la Asamblea estará a cargo de la vicepresidenta y titular del Senado, Victoria Villarruel, quien tras las formalidades de rigor y el izamiento de la bandera con la entonación de las estrofas del himno nacional anunciará los nombres de quienes conformarán las comisiones de Interior y Exterior.
La primera, que intercalará diputados y senadores de distinto signo político, será la responsables de darle la bienvenida a Milei, quien hará su ingreso al Palacio a través de la explanada de la avenida Entre Ríos. Luego atravesará los salones Gran Hall y de las Provincias, desde donde será escoltado al Salón Azul para firmar los libros de Honor, tras un formal saludo con Villarruel.
Después, será conducido junto a la vicepresidenta al recinto por la comisión de interior. Lo que seguirá es el discurso desde, esta vez, el atril.
El paisaje, además de los cambios simbólicos que impuso el presidente, será también singular: una crisis inédita en términos de relaciones federales del Ejecutivo y la decisión de «ahogar» a las provincias y sushabitantes con recorte de fondos. Se suma un nivel de pobreza a punto de perforar el 60% fruto de los aumentos de precios sin contención, la licuación del ingreso de las familias y los incrementos que llegan este mes en tarifas de servicios.
Afuera del Palacio, sobre la plaza del Congreso, no habrá prácticamente seguidores de Milei como ocurrió en la asunción presidencial y en lugar de ello se congregarán agrupaciones opositoras de izquierda y asambleas barriales que harán presencia para protestar contra la política del Gobierno. Ese será el termómetro social que marcará el pulso de la primera Asamblea Legislativa que encabece el líder de La Libertad Avanza.
