Luego de la decepcionante performance de Ricardo Alfonsín en las urnas, el radicalismo comenzó un proceso de revisionismo hacia adentro de su fuerza y no se hicieron esperar las críticas y los pases de factura entre sus dirigentes. En este sentido, Gerardo Morales dijo que la UCR fue parte de la “murga de la oposición” y Federico Storani profundizó sus reproches por la alianza llevada adelante en la provincia de Buenos Aires con Francisco de Narváez: “Se quiso hacer una suma aritmética que terminó siendo una resta”.
“En la oposición, aparecimos como una murga: cuatro candidatos, vanidades personales y falta de acuerdos”, enfatizó por su parte el jefe del bloque de senadores nacionales del radicalismo, el alfonsinista Gerardo Morales, al efectuar una dura autocrítica.
El ex presidente del Comité Nacional admitió luego que “hubo fallas de comando de campaña” en Udeso, además de equivocaciones “de interpretación de datos y de desarrollo de estrategias”, mientras que reconoció que fue un “error” el acuerdo del radicalismo con De Narváez.
A su turno, Storani, en el mismo sentido pero desde otro sector de la UCR, fustigó: “Uno de los graves errores que cometió en el último tiempo (el radicalismo) fue una política de alianzas que no tenía nada que ver con lo que, históricamente, el radicalismo pretendió representar”.
“(En 2007) cuando defendí la experiencia de (Roberto) Lavagna (como candidato presidencial del radicalismo) era porque teníamos afinidad de propuestas, él había sido un funcionario muy destacado de Raúl Alfonsín y, en materia económica, no estaba en un pensamiento antagónico”, recordó.
Al criticar a Ricardo Alfonsín, completó: “Diferente es cuando uno se la pasa planteando que pertenece al espacio socialdemócrata y, luego, da un viraje abrupto hacia De Narváez”.
“Debimos haber profundizado la política de acuerdos que estábamos llevando con el socialismo, con quienes tenemos una experiencia de gobierno bueno en la provincia de Santa Fe y hay una comunidad de propuestas y valores que se nos acercan”, se lamentó.
“Hay que tener cierta homogeneidad dentro del partido político, si no, no es un partido político. No se puede generar una feria de vanidades en el radicalismo”, dijo Storani y agregó: “Se quiso hacer una suma aritmética que terminó siendo una resta”.
En relación a posibles cambios, Storani opinó que “aumentando el cupo de jóvenes no creo que se arregle la situación. Un partido existe si representa a sectores sociales, pero hace tiempo no se sabe a cuáles representa. Hay que hacer que el partido salga más a esa militancia, y se plantee con cierta mística, porque se ha burocratizado en el mal sentido de la palabra”.
“El radicalismo es un partido de origen popular que no tiene que ver con vertientes conservadores”, resaltó en diálogo con una radio porteña.
Morales, por su parte, admitió que la UCR debe “profundizar la actitud permanente de renovación” para cambiar autoridades partidarias, con el fin de poder afrontar de otra manera el “desafío” de las elecciones parlamentarias de 2013, al tiempo que alertó: “Deberemos conseguir los votos que nos permitan reforzar los bloques de legisladores”.
El senador nacional, mediante un comunicado, reconoció que los radicales deben “centrar el trabajo en la conducción partidaria”, para lo cual reclamó una “reforma de la Carta Orgánica”.
Adelantó que propondrá esa modificación en la reunión de la Convención Nacional de la UCR del 17 de noviembre en Vicente López, para obtener “la elección directa del presidente del partido y la elección por colegio electoral de los integrantes de la mesa de conducción”.
Storani, a su turno, advirtió al alfonsinismo que evite proponer una reforma “de maquillaje”, al considerar que el cambio partidario debe incluir “mucho más a la militancia para recuperar la mística y revertir el estado burocratizado”.
Por su parte, el ex gobernador cordobés, Eduardo Angeloz, admitió que “el radicalismo debe hacer un mea culpa y un análisis completo de las definiciones” tomadas para “hacer una definición nueva (de la conducción)”.
“El partido no puede pensar en los diputados nacionales de 2013, sino pensar en hacer una propuesta válida y seria para que la sociedad acompañe en 2015”, reconoció el también ex candidato presidencial del radicalismo.