Organizaciones sociales y movimientos políticos marchaban en la mañana de este miércoles por las calles de Rosario como parte de una movilización nacional en reclamo de la actualización de los montos que perciben los beneficiarios de los programas de empleo y la Asignación Universal por Hijo (AUH).
La consigna convocante es “Macri: Trabajo sí, hambre no”. Organizaciones que reúnen a los sectores sociales más vulnerados, junto a varios sindicatos, habían acordado concentrarse a las 10 en la plaza 25 de Mayo, de Buenos Aires y Córdoba. Desde allí partieron por el centro hasta la sede de la Ministerio de Desarrollo Social de la Nación, en España 549. Hay un acto previsto para el mediodía frente a las instalaciones de esa dependencia.
Barrios de Pie, la Corriente Clasista y Combativa (CCC), la Confederación de Trabajadores de la Economía Popular (Ctep), el Frente Popular Darío Santillán y el Frente de Organizaciones en Lucha (FOL) son los organizadores de la movida. Los acompañan sectores gremiales como la Corriente Federal, ATE Nacional y CTA Autónoma.
Comunicado de las organizaciones sociales
“Los Movimientos Populares abajo firmantes, en el marco de la Jornada Nacional de Lucha, marchamos hoy a la delegación local del Ministerio de Desarrollo Social para exigir una paritaria social que contemple los aumentos de la canasta básica de alimentos y de las tarifas. La inflación que viven los sectores más pobres y humildes significa más hambre y pobreza, porque miles de familias no pueden acceder a comer todos los días. Se vive una grave situación social y laboral que debe ser afrontada con políticas públicas para el sector más afectado.
Acompañadas por organizaciones sindicales, reclamamos una respuesta del Estado para paliar la situación crítica que se vive en los barrios populares en un año que no promete mejoras y en el que los montos de los programas de empleo quedan absolutamente desfasados en relación a los aumentos de precios en alimentos, servicios y transporte.
También pedimos la implementación de una medida de carácter excepcional para los beneficiarios de prestaciones sociales del sistema de seguridad social nacional y para los beneficiarios de los distintos programas de trabajo que se encuentren domiciliados en las zonas de catástrofe afectadas por las inundaciones.
La combinación de diversos factores hacen que las familias afectadas vivan una situación de extrema vulnerabilidad, sumando a los problemas que ya tienen habitualmente las calamidades que implica una inundación de esta magnitud, como perder todo lo que tienen bajo el agua, no tener donde vivir, sin ropa ni alimentos para los más chicos, con riesgos para la salud y la integridad física de todos los afectados. Asimismo, se suma la imposibilidad de desarrollar las tareas cotidianas que permiten ganar el sustento diario.
También exigimos al Estado que interceda en la complicación de las familias de la economía popular para mantener la escolarización de sus hijos e hijas. Para esto pedimos kits escolares y elementos de estudio para que no avance la deserción en las escuelas y garantizar mayor acceso a la educación para niños, niñas y adolescentes de los barrios populares.
Asimismo, este año se insistirá con la aprobación urgente de las leyes para el sector presentadas en el Congreso Nacional que aún no tienen tratamiento parlamentario: Emergencia Alimentaria, Agricultura Familiar, Infraestructura Social, Emergencia en Adicciones. También pedimos poner en agenda legislativa la Ley de Emergencia en Violencia de género y el presupuesto para la ley de Urbanización de Barrios Populares, que fue aprobada en 2018 pero que no se está implementando en tiempo y forma.
A estos reclamos de carácter nacional, le sumamos el requerimiento de problemáticas que atañen a los gobiernos nacional, provincial y local, de urgente respuesta a la Emergencia Social y Alimentaria, declaradas tanto a nivel nacional como por los concejos municipales de las principales ciudades de la provincia:
– Incorporar cupos del Programa de Salario Social Complementario para las organizaciones de carácter local y regional que no se encuentran contempladas en las partidas nacionales, tendiendo a la universalización del programa.
– Queremos trabajar. Por ello, solicitamos la creación de un programa conjunto nacional y provincial de Trabajo para la construcción de viviendas populares y mejoramiento del hábitat de los barrios populares. Así como la Instrumentación de un programa para proveer a las organizaciones populares de herramientas y equipamiento de trabajo que nos permitan desarrollar y potenciar la organización de los trabajadores de la economía popular y las cooperativas de trabajo.
– Exigimos un inmediato aumento a $ 2.500 del monto de la tarjeta de ciudadanía, hoy en míseros e inexistentes $ 300, acercándose a valores reales que permitan a las familias beneficiarias del programa realizar una compra digna de alimentos.
– Red de comedores y merenderos diarios para sacar del hambre a nuestros pibes.
– Exigimos al Gobernador de la provincia incluya en la agenda extraordinaria de la Cámara de Diputados provincial, el tratamiento de los proyectos de Ley de Emergencia Social Provincial ya presentados”.