El secretario general de la CGT, Hugo Moyano, consideró esta mañana que la dirigencia «no puede crear más preocupación que la que hay» sobre la inflación, aunque reconoció que muchos productos de la canasta básica «han tenido aumentos que no son normales».
No obstante, el jefe de la central obrera destacó que, a pesar de los aumentos de precios, los hoteles que el Sindicato de Camioneros tiene en Mar del Plata y Córdoba «ya están llenos».
Y en esa línea, pidió que no se genere en la sociedad la idea de que existe «un desborde inflacionario».
El líder sindical aseguró: «No negamos nunca que haya inflación, pero en un país que crece la inflación no es mala, es normal».
«A veces la inflación, cuando es controlada, es muchísimo mejor que la pérdida de puestos de trabajo. Hasta ahora, vemos que no hubo un desborde inflacionario, como sucedió en otras épocas, con consecuencias nefastas», indicó Moyano, en declaraciones al canal C5N.
El gremialista señaló además que «en otras épocas, la inflación cero o la deflación se paga con puestos de trabajo».
Pero resaltó que «ahora, no podemos crear más preocupación que la que hay sobre la inflación, si bien cuando nuestras mujeres van al supermercado, se quejan porque aumentaron los precios».
Moyano destacó también que tiene una «buena relación» con el ministro de Economía, Amado Boudou, quien sostiene que en el país no hay un proceso inflacionario, sino una «tensión en los precios».
Además, subrayó que, a pesar de los aumentos de precios, «para esta Semana Santa, nuestros hoteles en Mar del Plata y Córdoba ya están llenos».
Con respecto a la discusión salarial, Moyano destacó que las paritarias «se vienen realizando con mucha responsabilidad y en condiciones normales».
Y aclaró que «no hay porcentaje de referencia para los aumentos salariales: cada uno discute el ingreso que está en condiciones de conseguir».
El sindicalista comentó que «al principio de la negociación, siempre se reclaman porcentajes altos de aumento, pero después eso cambia».
No obstante, aclaró: «Nosotros tomamos los precios de los alimentos que integran la canasta familiar para discutir salarios, porque buena parte de los ingresos de los trabajadores se van en alimentos. Y muchos de esos (precios) han tenido aumentos que no son normales».
