Hugo Moyano anunció que, hacia adelante, la CGT opositora que comanda oficialmente medirá la inflación. Sin embargo, la realidad marca que el camionero hace este ejercicio económico estadístico desde hace más de cuatro años, y con cierto profesionalismo que supera incluso a las mediciones privadas. Moyano, desde su puesto de titular de la Confederación General del Trabajo (CGT), elabora en privado y para uso interno de la central sindical una evaluación mensual de los principales precios del país, concentrados en alimentos y bebidas. Es lo que Moyano siempre llamó la “inflación del supermercado”, con la que hasta ahora sin mayor vehemencia aplicaba como la evolución real de los precios. Era la medición con la que justificaba ante el que le preguntara por qué en las negociaciones paritarias la presión cegetista sobre los aumentos superaba largamente en más de doce puntos porcentuales promedio la medición del Indec intervenido desde enero de 2006 por las huestes de Guillermo Moreno. Cuando el IPC oficial indicaba un 10 por ciento de evolución anual promedio, la “inflación del supermercado” moyanista nunca bajó del 20 por ciento, llegando algunos años a más del 25 por ciento con un récord en 2010 del 35 por ciento.
Fue en su momento Néstor Kirchner quien avaló, en sus días de aliado con el camionero, estas mediciones moyanistas como válidas, dando la orden de aceptar los números cegetistas como prudentes a la hora de negociar los aumentos salariales anuales.
En algunas negociaciones, incluso, como la de sus propios camioneros desde 2008 hasta el año pasado, Moyano sorprendió con datos sobre la mesa con exactitudes sobre cuál había sido la evolución real de los costos internos de los empresarios en un año. Técnicamente, a la estructura ya vigente, a la nueva medición se agregarán los nuevos datos sectoriales de medición, con la misma matriz que en su momento se preparó dentro de la CGT en 2008.
Una curiosidad. En algún momento, Moyano pensó en un técnico en un exacto punto de kirchnerista y crítico: el ex Aduana y hoy UIF José Sbatella. Ahora, la materia prima humana y técnica de la que se valdría Moyano serán los viejos funcionarios del Indec, eyectados por Moreno.
Ahora Moyano lanzó abiertamente el índice que elaboraba hasta ahora de manera interna, para la CGT, para ser considerado como el oficial para su central opositora.
