El secretario general de la CGT Azopardo, Hugo Moyano, habló sobre el día después del paro que realizará este jueves su central obrera junto a otros gremios opositores y afirmó que «el viernes se seguirá trabajando e insistiendo con los reclamos, no vamos a hacer una guerra civil».
En declaraciones a distintas radios, Moyano aseguró que los sindicatos que llevarán adelante la protesta no van a producir «ningún incidente», pero dijo que «nunca falta un buey corneta y el gobierno quiere desvirtuar el paro». «Le desconfío más al gobierno que a cualquier sector de la sociedad», agregó.
«El día del paro va a ser importantísimo y vamos a tener, no solamente a los gremios que ya están adheridos, sino también a trabajadores de gremios que lideran dirigentes que no se han adherido. Entre ellos, los metalúrgicos», vaticinó Moyano en alusión a Caló.
El titular de la CGT Azopardo, que convocó al paro del jueves junto con el líder de la CGT Azul y Blanca, el gastronómico Luis Barrionuevo, dijo que «seguramente no va a haber demasiadas respuestas» del gobierno de Cristina de Kirchner a los reclamos después de la medida de fuerza, pero señaló que «la responsabilidad» de las organizaciones gremiales es «que el trabajador no pierda poder adquisitivo de su salario».
«Esto es lo que desgraciadamente está ocurriendo y justo en estos gremios de la industria, donde están perdiendo salarios y puestos de trabajo. En Tierra del Fuego se han perdido miles de empleos y hay suspensiones y cierres de establecimientos. Y acá parece que no pasara nada», se quejó.
Moyano también cuestionó que los dirigentes justifiquen la posibilidad de acordar con las patronales aumentos inferiores a la inflación, con el argumento de que la situación económica pone en riesgo los puestos de trabajo.
El camionero afirmó que su par de la central obrera oficialista, Antonio Caló, habla «estupideces» cuando pide que se levante la medida de fuerza convocada para el próximo jueves y sostuvo que este paro será «importantísimo».
«No estoy para contestar estupideces. Que vaya a aplaudir a la Presidencia», cuestionó Moyano en alusión a declaraciones de Caló en las que calificó de «paro político» la medida de fuerza convocada para el jueves, que afectará al transporte, y reclamó que se levante para que los trabajadores puedan decidir por sí mismos si se adhieren o no.
«Es un mamarracho Caló. Es vergonzante. Que le vaya a preguntar a los metalúrgicos si están contentos con el aumento que sacaron», aseveró Moyano, en alusión al incremento del 29,5% para la Unión Obrera Metalúrgica (UOM).
«Este un mensaje que por intermedio de él (Caló) da el gobierno. Este es un mensaje del gobierno, no es un mensaje de él.
A mí me interesa que el trabajador que tenga trabajo gane lo que le permita vivir con mediana dignidad», planteó Moyano y agregó que «este es el verso de siempre de los que están negando la posibilidad de un aumento salarial» acorde con el encarecimiento del costo de vida.
En este sentido, dijo que el gobierno kirchnerista, inclusive cuando él tenía «buena relación» con la Casa Rosada, «siempre trató de que los aumentos salariales fueran menores a lo que uno pedía».
«Siempre. A mí me lo han dicho. Y nosotros siempre hemos pedido dos o tres puntos más que lo que el gobierno quería. Es que el gobierno se pone del lado de los empresarios, no se pone del lado de los trabajadores», sostuvo Moyano, que en diciembre de 2011 anunció su ruptura política con el gobierno kirchnerista.
En relación con los porcentajes de aumento, Moyano señaló que «tiene mucho que ver el piso salarial que tiene cada organización gremial» y ejemplificó: «Los bancarios tienen un piso alto. Ellos tienen un sueldo bastante considerable. No es lo mismo un porcentaje en bancarios que en comercio».
Al respecto, cuestionó el 30% de aumento salarial que acordó el sindicato de comercio, liderado por Armando Cavalieri (de la CGT de Caló), porque el de los mercantiles es «uno de los salarios más bajos de entre las actividades» y que «por eso la gente de comercio en muchísimos casos rechaza la conducción de su gremio».
«El aumento de un 30% en comercio no es nada. Son dos pesos. Es distinto al 29% o 30% que sacaron los bancarios, que tienen un piso alto. Nosotros, a lo mejor con un porcentaje menor, seguimos teniendo un salario con un poder adquisitivo bastante importante.
Y otros no. Esto es lo que hay que evaluar. Nosotros discutimos los porcentajes de acuerdo con mantener el poder adquisitivo del salario», afirmó el camionero.
Con todo, Moyano le bajó las expectativas a la advertencia lanzada por Barrionuevo respecto de futuros paros de 36 y 72 horas y sostuvo que eso «todavía no está discutido» porque aún «no se ha hecho la evaluación del paro» del jueves.
También cuestionó las estadísticas oficiales sobre empleo y desempleo y sostuvo que la desocupación «da un dieciocho y pico por ciento», más del doble de la del Indec, porque el gobierno «cuenta los subsidios y los toman como si el trabajador tuviera trabajo, y no tiene trabajo».