El juez Carlos Leiva rechazó que la Municipalidad de Arroyo Seco se presente como querellante en la causa que investiga la muerte una joven en el marco de una fiesta electrónica que tuvo lugar el 10 de enero de este año en esa ciudad. También falleció un joven, pero la muerte es investigada por la Justicia de San Nicolás porque el joven murió en su casa tras regresar de la fiesta. También hay una causa en la Justicia Federal que se tramita por las drogas que circulaban en la fiesta y no descartaban que toda la investigación acumule en ese fuero.
El abogado de la Municipalidad, Agustín Moscarielo, sostuvo que pidieron constituirse como querellantes “porque la Municipalidad tiene competencia para la salud publica, y por lo tanto en la vida”.
Pero el juez Leiva lo rechazó porque el bien el tutelado en la causa penal es el valor vida y dentro de las competencias del municipio no está la defensa de la vida, según detalló el letrado.
El fiscal Walter Jurado había argumentado primero que aún no hay personas sindicadas ni imputadas en el hecho y sostuvo que no hay nexo entre el interés de la Municipalidad y la investigación llevada a cabo por la Fiscalía para determinar cuál fue la causa de muerte.
La muerte de Giuliana Maldovan, de 20 años, después de asistir a una fiesta electrónica la madrugada del 1º de enero en Arroyo Seco fue el desenlace que muchos de los asistentes temieron esa noche. La joven se descompensó en el evento y fue trasladada al hospital Gamen de Villa Gobernador Gálvez, y después a la sala de terapia intensiva del Provincial de Rosario, donde falleció el domingo a las 19.30. Según el informe del Instituto Médico Legal, la joven sufrió una hemorragia múltiple que pudo ser provocada por el consumo de sustancias tóxicas como éxtasis, LSD o cocaína, a lo que se sumó un cuadro de deshidratación e hipertensión. También murió Lucas Liberatore, de 34 años, oriundo de San Nicolás, ciudad donde se investiga su fallecimiento.