El proceso de la oferta múltiple a la candidatura única que la oposición había transitado hace unos meses no sólo quedó trunco la última semana, sino que comenzó a ser desandado con el caso de Hermes Binner como testigo.
Sin Julio Cobos, Ernesto Sanz, Mauricio Macri, Pino Solanas ni Mario Das Neves en la carrera, y con otros aspirantes en problemas, Ricardo Alfonsín pareció consolidarse como el principal retador de Cristina Kirchner en octubre. Sin embargo, pocas semanas después el abanico empezó a desplegarse nuevamente. Influyeron varias razones: el imperio del ego y la fortaleza del oficialismo en las encuestas que alentó cruzadas propias en lugar de eventuales construcciones estériles.
Elisa Carrió (Coalición Cívica) ya dijo que no se baja, Alberto Rodríguez Saá juró que su boleta estará otra vez entre las presidenciales por el partido Es Posible y Felipe Solá definirá la semana próxima si compite con el sello del Partido Conservador Popular creado por Vicente Solano Lima.
La grilla opositora muestra a Alfonsín-Javier González Fraga, Eduardo Duhalde-Mario Das Neves (Unidad Popular), Carrió-Adrián Pérez, Jorge Altamira-Cristian Castillo (Frente de Izquierda), Rodríguez Saá, Solá y esta semana se sumaría Binner a la cabeza de un denominado Frente Progresista nacional.
Alfonsín fue pragmático al sellar un acuerdo con Francisco de Narváez en la provincia que representa el 40 por ciento de padrón electoral, pero al mismo tiempo desgajó la construcción que había iniciado hace un año junto al PS y el GEN, que a su vez ya había amputado Carrió. Hoy por hoy disputa el voto útil con Duhalde para ver si alguno llega al balotaje.
Binner va
Distintos referentes del socialismo, el GEN y Proyecto Sur dieron por seguro que el gobernador santafesino encabezará una fórmula nacional. Lo anunciará entre hoy y mañana, según supo NA, antes del Congreso del PS que será el próximo sábado. “Nunca contradijo a lo que quiso el partido”, anticiparon en su entorno.
“Todo lo que los socialistas nos vinieron diciendo lo cumplieron, así que ahora esperamos que el 11 de junio consagren a Binner como el candidato a presidente y comencemos a negociar formalmente”, señaló un referente del GEN a NA.
El partido de Margarita Stolbizer espera que su líder integre el binomio presidencial y propone a Jaime Linares para la Gobernación bonaerense, pero Proyecto Sur también aspira a ese cupo nacional y juega a que Mario Cafiero sea el candidato a gobernador. También sonó como aspirante a esos cargos a un hombre clave del grupo político, Víctor De Gennaro.
Binner consideró que con el actual escenario es más negocio formar parte de una propuesta de centroizquierda que confluir con la UCR y De Narváez, pese a que lo reconoce en lo personal al titular de la Unión Celeste y Blanco.
El punto a tener en cuenta es que hay provincias donde estaba cerrado un frente radical-socialista que en caso de que haya dos candidatos presidenciales podría dividirse. La Pampa y Entre Ríos son algunos ejemplos, con el agravante que eligen gobernadores en la misma fecha que presidente, el 23 de octubre.
En Santa Fe el Frente Progresista sobreviviría porque a diferencia de los otros distritos los comicios son antes, el 24 de julio, y un divorcio sería un suicidio colectivo.
Negociaciones
A pocos días del plazo para formalizar alianzas (15 de junio)y presentar candidaturas (24 de junio) la política nacional y bonaerense está sumida en reuniones. Un actor que está jugando entre bambalinas es el PRO. Los cinco estrategas nacionales del macrismo conducidos por Humberto Schiavoni manejaron en los últimos días la posibilidad de no integrar fórmulas presidenciales.
Con la premisa de preservar a dos de sus principales dirigentes –Federico Pinedo y Gabriela Michetti–, Macri evitaría dar pasos en falso y daría después del 31 de julio su apoyo al candidato mejor posicionado del ex Peronismo Federal, lo cual sería más valorado en caso de ganar en la Ciudad.
Un hombre de confianza de Eduardo Duhalde resumió el panorama de todo ese sector: “Hay negociaciones con el PRO y con Rodríguez Saá. Si el PRO presenta su fórmula, es posible que vayamos todos a las primarias del 14 de agosto, si no no tiene sentido y cada uno se presentará por separado el 23 de octubre”.
Cristina
En el oficialismo, no hay indicios de que Cristina Kirchner haya dado marcha atrás con su intento reeleccionista –más allá del tirón de orejas a Carlos Kunkel– y esperan definiciones para resolver el dominó de candidaturas.
En verdad, varios dirigentes de primera línea coinciden en creer que el diputado ultra dio en la tecla al anunciar que se lanzará el 23 de junio a su reelección, aunque el dato preciso sólo lo conocen la jefa del Estado y su principal estratega, el secretario de Legal y Técnica, Carlos Zannini.
La mirada ahora está puesta en el compañero de fórmula. Todo indica que será un peronista de no más de 45 años que satisfaga al principal nicho del electorado kirchnerista: los jóvenes. El ideal para Cristina era Jorge Capitanich, pero este prefiere jugarse a pleno para retener la Gobernación chaqueña. Juan Manuel Abal Medina reúne los requisitos, pero también aparecen otros nombres como los ministros Amado Boudou o Julián Domínguez.
En Buenos Aires, Daniel Scioli impulsa como compañera a Cristina Álvarez Rodríguez, pero la ministra también es mencionada para encabezar algunas de las listas premium de octubre: de senadores o diputados nacionales.
Otros dos nombres de peso que dan por seguro dentro de ese menú legislativo son Aníbal Fernández y José Pampuro. Aducen en la Casa Rosada que se vence el mandato de Eduardo Fellner como presidente de la Cámara de Diputados y que ese puesto estratégico siempre correspondió a la provincia de Buenos Aires.