En el marco del trabajo en conjunto que vienen realizando la Municipalidad de Rosario y el Gobierno de la provincia de Santa Fe, en las últimas semanas se llevaron a cabo inspecciones en autoservicios de venta de alimentos (y en algunos casos también de otros rubros) de la ciudad. Participaron agentes de la Secretaría de Control y Convivencia y del Ministerio de Trabajo, Empleo y Seguridad Social, quienes desarrollaron la tarea de acuerdo a las diferentes incumbencias, hecho que incluyó la verificación de las habilitaciones correspondientes, condiciones de seguridad, salubridad, higiene y registración de empleados.
En relación a este último tópico, inspectores de la Dirección General de Inspección de Industria, Comercio y Servicios y del Ministerio de Trabajo fiscalizaron en la ciudad 177 comercios., en los que fueron detectados unos 423 trabajadores. De ese total, 256 (es decir, el 61%) se encontraban registrados, mientras que los otros 167 (el 39%) estaban en condiciones informales. En este caso, gracias a la acción estatal, luego de la inspección se logró inscribir a 107 empleados, lo que indica una tasa de formalización (hasta ahora) del 64%.
Sobre aquellos comercios inspeccionados que no hayan regularizado en la audiencia de recepción de documentación a las personas relevadas, se les aplican las sanciones de manera gradual permitiéndoles, a su vez, que lleven adelante la registración hasta la instancia de la audiencia de descargo. Asimismo, el Ministerio de Trabajo realiza un monitoreo del relevamiento efectuado, reinspeccionando a fines de conocer la situación actual.
El secretario de Control y Convivencia municipal, Diego Herrera, entregó un balance muy positivo en torno a las actuaciones. «Este año pudimos trabajar en operativos de distinta índole en conjunto entre municipio y Provincia, lo que nos permite realizar una labor más completa y profunda y que claramente viene dando sus resultados como demuestra este operativo en autoservicio, o los que realizamos anteriormente en grandes depósitos”, expresó el funcionario.
Por su parte, el subsecretario de Fiscalización del Trabajo del Ministerio provincial, Jonatan Páez, destacó: “Desde el gobierno de la provincia llevamos adelante fiscalizaciones en conjunto con los municipios para trabajar de manera articulada porque nos permite avanzar para lograr los objetivos concretos. En este caso es lograr la regularización de los empleados en el circuito formal laboral para que puedan gozar de sus derechos”.
Las inspecciones se realizaron de forma equilibrada en los seis distritos de la ciudad. Así, se visitaron 36 negocios en el distrito centro; 27 en el noroeste; 38 en el norte; 28 en el este; 29 en el sudoeste, y 30 en el sur. En tanto, 96 autoservicios controlados eran de titulares de nacionalidad china, mientras que los 81 restantes pertenecían a propietarios nacionales.
A su vez, desde la Secretaría de Control y Convivencia municipal también destacaron las tareas de inspecciones sobre las condiciones de seguridad, salubridad e higiene de los locales, además de los relevamientos relacionados con el uso del espacio público para el depósito de mercadería.
En ese marco, de los 177 negocios visitados, unos 48 locales (el 27% del total) fueron sancionados luego de detectarse anomalías relacionadas con la caducidad o falta de desinfección o higiene, vigencia del carnet de manipulación de alimentos, carga de matafuegos, higiene en depósitos, instalaciones eléctricas precarias, y renovación de permiso publicitario. Todas estas cuestiones hacen al funcionamiento de cada lugar.
En este marco, desde el municipio remarcaron que hubo una leve baja en los índices de irregularidades en torno a la habilitación y/o los procesos de renovación o permiso de funcionamiento de este tipo de comercios, que años atrás giraron en torno al 35%.
Inspecciones en otros rubros
Vale recordar que municipio y la Provincia ya habían realizado en conjunto un operativo en distribuidoras, mayoristas y comercios con grandes depósitos en los meses de abril y mayo de este año.
Durante ese período se fiscalizaron en toda la ciudad 48 negocios de esas características, donde trabajaban un total de 122 personas. La tarea detectó un 30 por ciento de empleados sin registrar. A partir de acciones desarrolladas, un tercio de esos trabajadores en estado irregular ya ha sido inscripto de buena forma, mientras que el resto se encuentra en el mismo proceso.