El ex gobernador de Santa Fe y ex intendente de Rosario Hermes Binner falleció en la tarde de este viernes a los 77 años, tras una internación en un centro de salud de la ciudad de Casilda por un cuadro de neumonía. Lo confirmó a medios de prensa casildenses el director del Sanatorio Primordial.
Binner, político y médico, estaba en terapia intensiva desde el domingo. Antes, el referente del socialismo se encontraba en un geriátrico de Casilda debido a un cuadro de Alzheimer. Este jueves tuvo complicaciones en su cuadro de neumonía aguda que lo llevó a la internación y pasó a estar en «grave» estado, según el parte médico.
Binner «presentó como complicación neumotórax espontáneo primario, que requirió la colocación de tubo de avenamiento pleural», precisó el último parte médico que lleva la firma del director médico de la clínica de la localidad de Casilda, Santiago Moragues.
Binner fue el primer gobernador socialista del país y sus dos intendencias en Rosario transformaron la ciudad, en particular el sistema de salud municipal, reconocido en toda América Latina. Sus gestiones se caracterizaron por la transparencia, la participación ciudadana y la activa presencia del Estado con una visión solidaria.
Nieto de inmigrantes, Hermes Juan Binner nació en la ciudad de Rafaela el 5 de junio de 1943, ciudad a la que llegaron desde Europa sus abuelos. A los 18 años partió hacia Rosario para estudiar Medicina en la Universidad Nacional de Rosario. Allí comenzó su militancia en el Movimiento Nacional Reformista y el Partido Socialista Popular, al mismo tiempo que continuaba especializándose en Anestesiología, Medicina del Trabajo y Salud Pública.
Luego de trabajar en varios hospitales públicos de la provincia, en 1989 saltó a la gestión municipal, siendo el secretario de Salud del por entonces intendente socialista Héctor Cavallero. Cargo que ejerció hasta 1993, cuando fue electo concejal. Hasta que en 1995 ganó las elecciones a intendente, y fue reelecto en 1999.
Su gestión en Rosario se caracterizó por la activa y eficiente participación del Estado, a contramano de las políticas neoliberales en boga durante la década del 90. Es así que llevó a cabo la primera experiencia de descentralización del país: los distritos hicieron un Estado más cercano y eficiente. Convocó a la ciudadanía a involucrarse y con el Presupuesto Participativo los vecinos debatían y definían las obras que consideraban prioritarias.
Desarrolló un modelo de salud municipal que es motivo de orgullo y ejemplo en América Latina. Totalmente gratuito y con tres niveles de complejidad: se crearon numerosos centros de atención primaria en los barrios que se articulaban con efectores de mediana y alta complejidad.
Durante su gestión, Rosario recuperó la ribera del Paraná, dotándola de espacios públicos para todos los rosarinos. Pero su gobierno también tuvo un costado solidario: desde los centros Crecer para la primera infancia, los Centros de Día para los adultos mayores, hasta las huertas comunitarias.
A pesar de haber sido el candidato a gobernador más votado en 2003, la polémica ley de Lemas le prohibió llegar a la Casa Gris en ese entonces. Luego de ser diputado nacional por dos años, entre 2005 y 2007, finalmente se convirtió en el primer gobernador socialista del país.
A partir de 2007 impulsó en Santa Fe procesos de descentralización y de salud pública similares a los llevados adelante en Rosario. La provincia pasó así a estar organizado en nodos y se comenzó la construcción centros de salud y hospitales de mediana y alta complejidad en todo el territorio santafesino, que continuarían y se incrementarían en las siguientes gestiones socialistas.
Pero además inicio el proceso de reforma de la Justicia, desarrollando un nuevo sistema de Justicia Penal. El foco también estuvo puesto en la educación, con la construcción de edificios nuevos y de remodelaciones de escuelas, titularizando a más de 10 mil docentes.
En 2011 fue candidato a presidente, obteniendo el segundo lugar detrás de Cristina Fernández de Kirchner, en 2012 asumió la presidencia del Partido Socialista y en 2013 fue electo nuevamente diputado nacional.
Su candidatura a senador nacional en 2015 fue su última participación en la arena electoral, iniciando así su retiro de los primeros planos de la participación política y partidaria. Desde 2019 estaba internado en un geriátrico de Casilda, afectado por un cuadro de Alzheimer y complicaciones renales.