El multimillonario estadounidense Kirk Kerkorian falleció el lunes por la noche a los 98 años, según lo dio a conocer este martes su empresa MGM Resorts.
El inversionista y magnate de los casinos era dueño del holding Tracinda en Beverly Hills.
Hijo de inmigrantes armenios, se hizo famoso con negocios hoteleros e inmobiliarios y era considerado el «rey de Las Vegas» y uno de los principales responsables del «boom» de los casinos en el desierto de Nevada.
Kerkorian también ocupó los titulares de la prensa por sus transacciones con la compañía Metro-Goldwyn-Mayer, a la que en total compró y vendió tres veces.
También más allá de los juegos de azar y la industria cinematográfica, Kerkorian desplegó inversiones a gran escala. Por ejemplo de a momentos fue dueño de fuertes porciones de los gigantes de la industria automotriz Chrysler y General Motors (GM).
La revista estadounidense «Forbes» estimó su patrimonio en su más reciente reporte en unos 4.000 millones de dólares (unos 3.600 millones de euros).