La lechuza que era un símbolo de suerte para los seguidores de Atlético Junior y que el domingo recibió una patada del jugador panameño del Deportivo Pereira, Luis Moreno, en un partido transmitido por TV a todo el país murió en la madrugada de hoy.
La patada de Moreno a la lechuza, una habitué del estadio Metropolitano de Barranquilla y cuya presencia cerca de la cancha coincidía con victorias del Junior, dominó las polémicas de los espacios deportivos en la prensa colombiana.
El ave habría muerto por acumulación de ácido láctico, producto del estrés por los golpes y la manipulación, según la primera hipótesis veterinaria del Departamento Administrativo Distrital del Medio Ambiente.
Moreno pateó la lechuza, que previamente había recibido un pelotazo, visiblemente molesto en momentos en que su equipo perdía el partido. Su gesto fue ampliamente reprochado por otros jugadores y dirigentes del fútbol colombiano.
El jugador visitó el lunes en la tarde el zoológico de Barranquilla en señal de arrepentimiento y se lamentó de lo que pensarán sus hijos, expuestos a las imágenes repetidas una y otra vez por los medios locales, a quienes, afirmó, no sabe qué les va a decir.
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