Emiliano Moyano, el cuarto hijo del líder de la CGT, Hugo Moyano, falleció este jueves por un paro cardíaco. Según trascendió, Emiliano, que nació en 1975, estaba internado en una clínica neuropsiquiátrica con un cuadro de psicosis y esquizofrenia severa.
En total, el cacique camionero tuvo siete hijos: Pablo Hugo Antonio, María Isabel Paola, Karina Eva Beatriz, Emiliano, Juan Facundo y Hugo Antonio. La madre de los primeros cuatro es Olga Beatriz Mariani, la primera pareja. Los otros dos los tuvo con su actual mujer, Liliana Esther Zulet.
En su el libro «El hombre del camión», el periodista de Ámbito Financiero Mariano Martín, describió a los «ataques de violencia» que padecía Emiliano y los esfuerzos que tuvieron que hacer en la familia para frente a los «cuadros psicóticos».
«Mientras Hugo crecía a paso lento en el gremio y la ciudad se partía en una guerra interna, en el pequeño mundo de la casa de los Moyano, su cuarto hijo, Emiliano sufría otra guerra interna. A Moyano siempre le gustó ese nombre. Emiliano. Fue el último fruto del matrimonio con Olga. Nació en 1975 y antes de la adolescencia comenzó a manifestar problemas de agresividad», relató Martín en su biografía sobre Moyano.
El relato referido a Emiliano continúa así: «Siempre fue un chico agresivo pero con los años su carácter se tornó un problema. Moyano y su esposa jamás pensaron que detrás de la ira, Emiliano escondía un cuadro psicótico. Tenía picos violentos que descolocaban a toda la familia. Había días que Moyano no podía mirar a su hijo sin recibir un grito de desprecio: ‘¿Qué mierda mirás, forro?’. Cuando la relación ya fue «insostenible, Hugo pidió ayuda. En la obra social camionera le informaron que su hijo padecía psicosis y que debía recibir un tratamiento con láser». «Me lo plancharon» , se abrumó el dirigente cuando recibió a su hijo luego del tratamiento. Desde entonces, su enfermedad está bajo control y Olga se encarga de cuidarlo y vigilarlo. Pablo, que era el mayor y el más cercano a Hugo, dice que padeció ‘la ausencia'».
Emiliano murió de una insuficiencia cardica. Vivía en la localidad bonaerense de Exaltación de la Cruz junto a su madre.