El tenista británico Andy Murray se quedó con el Masters 1000 de Toronto al vencer en la final al suizo Roger Federer por 7-5, 7-5. Así, el escocés se convirtió en el primero en ganar dos veces seguidas este torneo desde que el estadounidense Andre Agassi lo hiciera en 1994 y 1995.
Murray, cuarto preclasificado, detuvo una cadena de tres derrotas seguidas ante Federer, que pese a la caída regresará a la segunda posición del ránking de la ATP cuando se de a conocer el lunes la clasificación semanal.
El escocés, que ganó en Toronto su primer título del año y el decimoquinto de su carrera, se mostró muy feliz y exclamó: «Es muy difícil cerrar un partido contra Roger. Fueron unas condiciones increíblemente difíciles para los dos».
La final comenzó con un pequeño retraso debido a la lluvia, pero rápidamente Murray dejó sentadas sus intenciones al quebrarle dos veces el servicio a Federer para irse al frente 3-1.
El escocés fue incapaz de cerrar el primer set cuando con ventaja de 5-3 desaprovechó un punto de partido, y cometió una doble falta, lo que permitió a Federer nivelar el tope 5-5.
Empero, el suizo perdió su servicio para caer 6-5 en el marcador, lo que abrió las puertas a Murray para llevarse el último juego y sellar el 7-5 del primer parcial tras una hora de lucha.
La lluvia volvió castigar cuando Murray ganaba el segundo cuadro 2-1, y tras una pausa de 55 minutos el escocés se puso delante 3-2 antes de que el juego se detuviera de nuevo por el fuerte aguacero.
Tras otro prolongado lapso, Murray regresó con más disposición y terminó su obra ante un Federer que no dejó de pelear en todo momento, aunque se lo vio indeciso en las definiciones de los puntos.
«La lluvia no ayudó mucho, pero aproveché el tiempo en los vestidores para pensar», dijo Murray. «Fue realmente duro, pero he ganado la final», acotó contento el británico.