Owen Barraza es rosarino, tiene 11 meses y por una mala praxis nació con un edema cerebral (acumulación anormal de líquido en el cerebro). El bebé tiene internación domiciliaria y necesita de la asistencia de enfermeros, kinesiólogos; fonoaudiólogos; nutricionista y pediatra. El chiquito necesita para vivir una bomba de alimentación, tubo de oxígeno, saturómetro y dos aspirativos para limpiar secreciones.
El bebé tenía la obra social de su papá, la Asociación Mutual Mercantil Argentina (AMMA). Sin embargo, el 7 de mayo pasado les avisaron que lo dejaban sin cobertura porque “desde la Superintendencia de Servicios de Salud no prestaban servicio en la provincia de Santa Fe”, según contó Silvina Bustamante, su mamá.
“El 31 de mayo pasado me aceptaron en OSPECON, la obra social del personal de la construcción. La mutual no se niega a darle a mi hijo la atención y los insumos que necesita pero por ley corren 90 días de carencia. Es decir, que hay que esperar tres meses para que entre en vigencia su cobertura”, explicó la mujer. Y siguió: “Fui con un abogado a la Defensoría del Pueblo y corroboró en la página de Anses que todavía le corresponde a mi hijo la obra social de los mercantiles. Los aportes de mi esposo se hicieron este mes en AMMA y nos dieron de baja el lunes 27 de mayo”, explicó desesperada la mujer.
“La obra social AMMA amenaza que me van a sacar los insumos que necesita mi hijo para vivir. Estoy pidiendo la cobertura de la mutual para que siga vigente hasta que pueda usar la de OSPECON”, reclamó Silvina.
Esta familia de la zona sudoeste de la ciudad está viviendo días de mucha angustia e incertidumbre. Owen, su hijito que todavía no cumplió el año, necesita todos los días de profesionales que lo asistan y lo estimulen, y de insumos para poder vivir. Esperemos que no hagan oídos sordos.
