Embarcada en un recorrido ya transitado por otras grandes de la escena vernácula, algunas de trascendencia nacional, la actriz y humorista local Nadia Juárez, conocida por muchos por La Jua Jua Juárez, cuenta con los elementos como para sumarse a esa lista de talentosas capocómicas rosarinas.
Con varios años recorridos en los escenarios y una fuerte presencia en las redes sociales donde sus avatares diarios, muchos de ellos de orden familiar, son tratados con un humor desopilante, la actriz, junto a otros artistas, estrenará este viernes en el Complejo Cultural Atlas su nuevo espectáculo titulado Seso salvaje, dejando en claro que la sexualidad se resuelve, primero, en la cabeza.
“En realidad, es una invitación a repensar la sexualidad”, dice Nadia, que mediante una serie de monólogos impregnados de las problemáticas del presente invita a mirar las sexualidades y la diversidad a través de los filtros del humor sin dejar de lado la reflexión y la emoción.
“Seso salvaje es un espectáculo en el que cada detalle está pensado para interpelar al espectador y llevarlo a que se haga algunas preguntas. Por eso, para el armado del texto, contamos con el asesoramiento del doctor Federico Bordón, presidente de la Asociación Sexológica del Litoral (ASeL), institución que en septiembre presentó sus jornadas sobre sexualidades en la ciudad de Santa Fe, y que fueron el marco de estreno de este trabajo”, expresó la actriz.
El sexo en el matrimonio, la relación con el cuerpo, las inhibiciones y la diversidad, entre otras, son algunas de las temáticas por las que transita el material, “siempre desde el humor, porque es más fácil crear conciencia a partir del humor; la letra, con risa entra”, sostiene la humorista que en esta ocasión estará acompañada, en distintos momentos, por el Mago Manuel, la drag queen Osquria, con el debut de Mariana Maldonado y la participación de los bailarines Yuslandi Hernández Ortega y Milton Cabral.
“Creo que la risa es lo que espera la gente cuando me va a ver, pero al mismo tiempo, este trabajo es una invitación a reflexionar sobre ciertas cosas que nos pasan por estos días, y en el final hay un sorpresa destinada a las mujeres, porque siempre digo que mi cuerpo es mi bandera, y la idea es poner en valor la diversidad de los cuerpos. Entiendo que es un final muy emotivo y me costó mucho poder ensayar esa última parte del espectáculo sin ponerme a llorar”, expresó la actriz en diálogo con El Ciudadano.
Con algo de la impronta argentina tan marcada por el grotesco donde por lo mismo que se ríe, se llora, la nueva propuesta de Juárez parece buscar su tránsito por ese camino. “De algún modo, siempre nos estamos riendo de nuestras propias desgracias; eso es también algo muy propio del stand up que además tiene tantas aristas, pero que está mucho mejor cuando a partir del humor llevamos a los espectadores a pensar un poco sobre algunas cuestiones del presente de las que hay que hablar. Volviendo al grotesco, si me río de mis propias desgracias y lo comparto con los demás desde un escenario, es porque pude trascender eso. Y el que se ríe conmigo de lo que yo cuento se lleva una cuota de esperanza porque si yo puedo superar algunas cosas, todos podemos”, expresó Juárez.
Todo terreno
Diva de calle San Luis, como se llamó otro de sus espectáculos, y casada con El Gustavo, a quien alude en cada una de sus publicaciones en las redes sociales, el humor de Juárez, más allá de la picardía, no deja de ser un humor blanco que se tiñe de lo cotidiano, algo que también demuestra por estos días con su participación en una de las obras del ciclo Micro Teatro en La Raíz.
“Seso salvaje arranca hablando de la sexualidad dentro del matrimonio; en ese sentido tiene mucho de didáctico, y en lo personal hice un poco de catarsis (risas), porque para poder hablar de sexualidades primero tenemos que pensar qué es la sexualidad y qué nos pasa a nosotros con eso. Incluso hay una serie de términos que utilizamos cotidianamente pero lo hacemos erróneamente o bien no sabemos cómo definir algunas cosas. Ése es un tema de identificación inmediata con el público: el vínculo de la pareja y cómo las cosas van cambiando con el paso del tiempo. Todo eso es la primera parte; después me meto con otros temas con los que nos cuesta mucho más vincularnos”, expresó la actriz.
Y continuó: “Allí aparecen una serie de interrogantes en relación con aquello que nos pasa con el cuerpo y con el deseo, qué nos pasa que muchas veces no podemos ni siquiera nombrar algunas partes de nuestro cuerpo, porque increíblemente hay palabras que para algunos siguen siendo prohibidas dentro de nuestro lenguaje, y entonces las disfrazamos y las decimos de un montón de otras maneras. En ese momento hago un juego con el público: nos cuesta hablar de la menstruación, no cuesta decir parir, entre tantas otras palabras”.
Juárez transita en su nuevo espectáculo la diversidad tanto desde lo estético como desde lo discursivo. “Hay un momento en el que doy un salto hacia la diversidad para que dejemos de juzgar a los demás por sus elecciones. Partiendo de la idea que diversidad tiene la misma raíz que la palabra diversión, trato de dejar en claro que sería mucho más divertido aceptar a cada uno o una tal como es. Y termino con un momento muy reflexivo pero necesitaba que esté, para dar paso en el final a un monólogo y una canción dedicada a las mujeres, mis grandes homenajeadas”, ejemplificó.
Romper las reglas
“En la sociedad, hay una exigencia puntual sobre los cuerpos de nosotras, las mujeres. De muchos hombres, hay mujeres que dicen que tienen una pancita sexy, y la mujer que tiene pancita, enseguida es una descuidada y le piden que vaya al gimnasio o deje de comer. Hay mujeres a las que les dicen gordas y quizás tienen un kilo de más. Pero no pasa sólo por las exigencias de las formas del cuerpo. Yo acabo de cumplir 40 años y también se nos exige a las mujeres no envejecer, no hay que tener arrugas ni canas. Leí un artículo acerca de las canas de la reina Leticia mientras se mueren de hambre millones de personas en el mundo”, expresó la actriz acerca de su militancia por los cuerpos diversos.
Y completó: “Eso mismo pasa con la sexualidad, porque también es una cuestión cultural. El cuerpo es el territorio de la sexualidad, entonces todo lo que expresamos a través del cuerpo habla de nosotros como individuos y como sociedad. Este espectáculo es una invitación a re pensar la sexualidad, así, separado, y en dos sentidos: a pensarla mucho y al mismo tiempo a darle una vuelta de tuerca, reconociendo que todos alguna vez vimos las cosas de una manera determinada pero que ya es hora de que podamos ampliar esa mirada”.
Para agendar
Seso salvaje, el nuevo espectáculo de Nadia Juárez, se conocerá este viernes por la noche, a partir de las 21, en el Complejo Cultural Atlas, de Mitre 645, donde también se venden las entradas a precios populares