Dallas Mavericks conquistó anoche por primera vez en su historia el título de la Liga Norteamericana de Básquetbol profesional (NBA), al derrotar a Miami Heat, en condición de visitante, por 105 a 95, en el sexto encuentro de la serie final.
De esta manera, el equipo dirigido por Rick Carlisle se adjudicó la serie decisiva por 4-2. Dallas se desquitó de esta manera de la caída sufrida (por idéntico marcador) en la definición de la temporada 2006-07. En aquella ocasión, los Mavericks se habían ilusionado con el título, después de ganar los dos primeros partidos.
El goleador y figura del partido fue el escolta reserva del flamante campeón, Jason Terry, quien aportó 27 tantos, 2 rebotes, 2 asistencias y 2 bloqueos.
El ala pivote alemán Dirk Nowitzki, jugador símbolo del equipo, apareció en el segundo tiempo, donde anotó 18 de sus 21 puntos, además de contribuir con 11 rebotes. También fue elegido el `jugador más valioso` (MVP) de la final.
Con inteligencia y una gran defensa sobre los hombres claves de Miami (LeBron James y Dwayne Wade), Dallas dominó en un partido de por sí parejo.
Hubo desequilibrio en el uno contra uno, además de una muy buena conducción de Jason Kidd (9 puntos y 8 pases gol). También lució el base puertorriqueño José Juan Barea, con 15 tantos y 5 asistencias.
Tanto LeBron James (22 puntos) como Dwayne Wade (16) tuvieron noches opacas, más allá de los números.
El partido tuvo distintas alternativas: Miami comenzó ganando por 9 puntos, pero Dallas se recuperó y con un parcial de 22-4 se fue adelante por 32 a 27.
En el segundo cuarto, los Mavericks lograron su máxima ventaja en la etapa inicial (40-28), pero Miami, con los triples de Eddie House, metió un parcial de 14 a 0 para situarse adelante: 44-40. Reaccionaron los Mavericks y se quedaron con el período por un ajustado 53-51.
En el tercer tiempo, Dallas empezó a definir las cosas, ya que Barea martirizó con sus penetraciones a la defensa de los Heat y Nowtizki dijo presente para sacar una luz de 9 puntos: 81-72.
En el comienzo del último segmento se acercó Miami a cuatro puntos (77-81), pero otra vez Barea con un triple acalló a la gente local. Más tarde, Terry y Nowitzki hicieron lo suyo y le entregaron a los Mavericks su primer título en la historia.
