Una nena de 12 años apareció muerta en una pileta olímpica durante un cumpleaños en el partido bonaerense de Avellaneda y como su familia sospecha que no se trató de un accidente, pidió que se investigue si fue un homicidio.
La chica, identificada como Brenda Rivas Ovelar, estaba participando de la reunión, cuando de repente desapareció y fue hallada en el fondo de la pileta, de donde se la sacó pero no pudo ser resucitada.
El abogado de la familia de la chica, Cristian Pérez, dijo al programa «Inocentes y Culpables» de radio Mitre que solicitó una serie de medidas tendientes a disipar las dudas sobre el hecho.
«Realmente no encontramos explicación a que una criatura de 12 años con un estado íntegro de salud, una chica deportista, diligente y con gente que estaba muy a su cuidado, haya sufrido una fatalidad», sostuvo.
El letrado dijo que «evidentemente fallaron un sinfín de cuestiones, algunas de ellas que pueden estar relacionadas con una culpa y otras con una intención».
«De lo que no nos cabe duda es que estamos frente a un homicidio, lo que vamos a disipar es si es un homicidio culposo o intencional y descartamos totalmente el accidente porque una pileta olímpica debe estar munida de un montón de cuidados», señaló.
Al respecto, mencionó que en el lugar no había guardavidas ni vallas de contención.
El caso, que se conoció hoy, ocurrió el 9 de mayo cuando se festejaba el cumpleaños de Mario Medina, cuñado de la nena muerta, en un salón con piscina climatizada olímpica.
Según declaró la madre de la niña en el expediente, su hija y sus nietos estaban jugando hasta que parte de los niños le dijeron que no encontraban a Brenda y comenzaron a buscarla por el salón hasta llegar a la pileta.
Medina, cuñado de la chica, advirtió que estaba en el fondo de la piscina, por lo que se tiró al agua, pero no pudo rescatarla.
Lo mismo le ocurrió a otros tres invitados hasta que un cuarto la sacó y un integrante de la Prefectura Naval que se encontraba en la fiesta le hizo masajes cardíacos y maniobras de reanimación, pero no logró revivir a la chica.
Entonces, una ambulancia que ocasionalmente estaba en la esquina del salón trasladó a la nena al Hospital Fiorito, donde continuaron las maniobras de resucitación, pero determinaron que estaba muerta.
La causa fue caratulada como «muerte dudosa”, pero el abogado pidió en los últimos días que se cambie la calificación legal a «homicidio culposo”, se clausure la pileta y el salón y se identifique a los dueños del lugar.
«Cayó muerta a la piscina? La tiraron al agua para ocultar algo, que pasó?, se preguntó el letrado en el escrito.