La actual dirigencia leprosa trabaja y se las ingenia de forma permanente para equilibrar las debilitadas finanzas, producto de una herencia económica por demás de complicada. En ese sentido, el tesorero Jorge Ricobelli señaló que hoy el órgano fiduciario emitirá un informe preliminar sobre el monto al cual ascendería la deuda de Newell’s. Al conocerse este primer bosquejo, la dirigencia empezará a planificar un futuro un poco más preciso para afrontar el pasivo.
Ricobelli no quiso aventurarse y evitó arrojar una cifra estimativa de cuál será el monto definitivo de la deuda. “Por una cuestión de respeto al trabajo del órgano fiduciario no plantearemos ningún número, más allá de que tenemos alguna estimaciones internas”, explicó. Sin embargo, consideró que “el número final del reclamo se va a reducir de manera importante luego de realizar objeciones a los reclamos convencidos de que muchas presentaciones no tenían asidero legal y eran muy dudosos”.
El tesorero leproso amplió al respecto: “Estábamos seguros desde el momento que tuvimos que opinar sobre las presentaciones, que había muchas que no reunían la documentación necesaria. Esperamos haber tenido razón en los planteos que hicimos. Ahora se van a caer muchos argumentos y muchas culpas adjudicadas a nosotros. Acá habla la Justicia, que fallará sobre una deuda anterior a nuestra gestión. Nosotros estamos al margen más allá de que algunos nos quieran endilgar la culpa”.
Para Ricobelli, en estos dos años de gestión se produjo un ordenamiento de las finanzas. “Básicamente encontramos un club devastado en todo sentido, ni hablar desde lo económico. Lluvia de cartas documentos, demandas y embargos diarios. Y la figura del fideicomiso fue la oportunidad para la supervivencia. Desde ahí tuvimos el tiempo para ordenarnos. No estamos bien, pero estamos mucho más ordenados y con otra perspectiva hacia futuro. Cuando conozcamos la deuda real, vamos a poder planificar algo que hasta ahora manejábamos día a día”, aseguró.
“Newell’s hizo frente a 15 millones de pesos que se le debían a los jugadores. Cuando asumimos en diciembre de 2008, el plantel tenía una deuda de 5 meses y medio, que se canceló con el nuevo contrato de la televisión. Esa deuda la pagó esta gestión obligados y forzados por Futbolistas Argentinos Agremiados”, recordó.
El tesorero leproso reconoció que existe un atraso con los jugadores: “Cuando terminó el partido con Olimpo hablamos con un par de jugadores para plantear la situación. Reprogramamos algunos pagos vencidos. Igual, la relación es excelente y no hay malestar. Incluso con todos los jugadores que se fueron del club en el semestre anterior hicimos un plan de pago sobre primas que estamos cumpliendo”.
No obstante, para acomodar los números es imprescindible la venta de algún futbolista en este receso: “Ningún hincha de Newell’s puede pensar en no vender. Alguna venta se tiene que hacer porque al club tiene que ingresar dinero. Cuando más pronto se haga, mejor podremos trabajar en la búsqueda de refuerzos. Lamentablemente se pueden escapar algunas opciones, pero son los problemas que debemos afrontar. Siempre tratamos de anticiparnos y eso nos ayudó a armar el plantel antes de la pretemporada. Pero un gasto mayor va de la mano con una venta”.
Y cerró: “Aquel dirigente del fútbol argentino que diga que hay jugadores intransferibles, miente. Mucho menos nosotros por los problemas económicos que tenemos. Eso no implica vender a cualquier precio”.