En marzo de 2019, un grupo de mujeres leprosas decidieron armar la filial Anna Margarita, en honor a la mujer que, junto a Isaac Newell, en 1884, creó en Rosario el Colegio Comercial Anglo Argentino y reconstruir la historia de una mujer que estuvo a la sombra de su marido y hoy se convirtió en bandera.
En calle Entre Ríos al 200, la pareja decidió fundar un colegio propio. En ese establecimiento educativo fue en el que años más tarde, un 3 de noviembre de 1903, nació el Club Atlético Newell’s Old Boys. En el patio del colegio se reunieron alumnos y ex alumnos y decidieron crear el club en honor a Isaac: los viejos muchachos de Newell dieron así el puntapié inicial a la rica historia leprosa.
Ambos se recibieron de profesores de inglés en 1878, y trabajaron en el Colegio Anglicano, anexo a la iglesia San Bartolomé, en Urquiza y Paraguay. El mismo año de la graduación, el 26 de mayo, nació el primer hijo del matrimonio: Claudio Lorenzo. Luego nacerían Liliana y Margarita.
Sin embargo, la historia de la mujer que a la par de su compañero le dio vida al club del Parque Independencia mucho no se contó. Tan importante fue Anna Margarita Jockinsen, que la historia oficial indica que uno de los colores del elenco rojinegro es en su honor: el negro por la bandera de la patria de ella, que era alemana, y el rojo por la de él, que era inglés.
“Ahora entramos nosotras”: Anna Margarita, rescatada de la historia leprosa
Este sábado se inauguró una rotonda en su nombre. Bajo la ordenanza municipal 10.406 y el lema “con la educación como bandera y la pasión como legado”, la intersección de Bv. Oroño e Intendente Morcillo, será para ella.
Lucia Cosciuc, integrante de la Peña que llevó adelante la iniciativa, dialogó con El Hincha minutos antes de destapar el monumento que se colocó en la rotonda frente al calendario floral del Parque Independencia. Cosciuc describió el evento como “un momento de justicia y memoria”.
“Fue un recorrido y hubo voluntad política. Sabemos, como militantes feministas, que hay que transitarlo y ponerle el cuerpo”, afirmó.
Y dijo: “Hoy es un momento de reivindicación, de reconocer parte de la historia que sabemos cómo mujeres que históricamente se nos ha negado. Esa fue la historia de Anna, como fundadora, como pionera, educadora. Hoy es su lugar en lo público. La trasladamos de la circunscripción de la institución Newell’s, para pensarla colectiva, que su legado queda mucho más allá de pensarla desde la institución sino para la historia de nuestra ciudad”.
“Nosotras soñamos que a la misma altura que se levantan las banderas de Isaac, se levanten las de Anna. No hace falta explicar tanto quién era ella. Si vamos a la historia, reconocemos Isaac y su pareja, Isaac y su esposa, hoy es Isaac y Anna. Ella fue nuestra pionera, trabajó a la par. Se trata de revalorar nuestra propia identidad”, cerró la integrante de la Peña Anna Margarita.
