El plantel de Newell’s retomó los entrenamientos este miércoles luego de un paro de 24 horas en reclamo por una deuda salarial de tres meses.
La medida, adoptada como forma de protesta, se dio en solidaridad con los empleados del club, quienes también atraviesan retrasos en los pagos. Los jugadores, que se habían presentado en el predio Jorge Griffa pero sin entrenarse, decidieron suspender la actividad una vez garantizada la permanencia en Primera División.
La deuda, correspondiente a la gestión del presidente Ignacio Astore, se acumula desde agosto y afecta especialmente a los futbolistas más jóvenes.
Tras la difusión de un mensaje del capitán Ever Banega en redes sociales, denunciando la vulnerabilidad económica del plantel, la dirigencia habría comenzado a regularizar parte de los haberes este miércoles.
El próximo compromiso del equipo será el domingo ante Racing, en el Coloso Marcelo Bielsa, en el cierre de la temporada.
