“Hay que volver a las fuentes: después de 30 años de socialismo, hay que volver al progresismo sin aparatos, sin padrinos y sin marketing”, sostiene Nicolás Gianelloni, secretario de Economía Social de la ciudad y candidato a senador por el departamento en la interna del Frente Progresista, con el espacio Arriba Rosario.
“Hay modificar las formas de hacer política, evitar la burocracia. Vamos por un lugar en el Senado para seguir por ese camino de renovación que implica hacer política de manera más ágil, más creativa y que, sobre todo, dé resultados inmediatos”, marca el precandidato en diálogo con El Ciudadano.
—¿Son éstos los argumentos de la decisión de participar en la interna del frente Progresista?
—Es que, como dice nuestro referente y candidato a intendente Pablo Javkin, el Frente Progresista quedó reducido a un partido. Y el presente nos demanda renovar equipos de trabajo, convocar y primordialmente escuchar a actores sociales nuevos; en síntesis, abrir el juego en serio, pasar de la retorica a la acción. Pablo nos dice todo el tiempo que hoy somos más los que pensamos que el Frente le puede dar mucho a la ciudad, defendiendo lo que tenemos pero menos enamorados de lo que se hizo y más enamorados de lo que corresponde hacer para adelante.
—¿Cuál es el plan para Rosario?
—Rosario es una ciudad en la que las épocas de crisis se sienten, y mucho. La desocupación, por ejemplo. Pero también hay que decir que es uno de los lugares donde la resistencia al ajuste por parte de los sectores populares se expresa con más intensidad. En ese marco, tenemos propuestas muy concretas: por ejemplo, el tema de la movilidad y del transporte es una gran deuda que tiene la provincia. Estamos atrasados en esta problemática. Tenemos en carpeta crear una Empresa Provincial de Trenes que conecte a las diferentes regiones de la provincia.
—¿Y en cuanto al desarrollo económico local?
—Desde el área de Economía Social de Rosario fuimos impulsores de un conjunto iniciativas para, de alguna manera, impactar positivamente en el mercado interno. Así, trabajamos en el Mercado del Patio, que no es otra cosa que un programa para emprendedores y la posibilidad de generar un espacio comercial para que la gente compre a personas de la ciudad. Este es un eje de nuestra propuesta, construir una red comercial de mercados en toda nuestra región.
—¿Cómo impacta la política nacional en la región?
—Las políticas públicas del gobierno nacional adolescen de serios problemas de gestión, una fuerte impericia y un notable desconocimiento de los problemas reales de la sociedad. Y la verdad es que no es una sorpresa, porque si los ejes de construcción son privilegiar el capital financiero, la concentración de la producción agropecuaria y el desarrollo de megaminería sin control alguno, los resultados van a ser desastrosos. Esta lógica supone un país para pocos: la concentración siempre implica más pobreza, fuerte caída del empleo y mala calidad en la educación. Así, el ajuste dispara el asistencialismo, una deformación atroz de la política.
—¿Cómo piensan desde su perspectiva el rol del Estado?
—Es clave, por presencia o ausencia. El tema es que la ausencia o “retirada del Estado” es también una decisión política. Es por eso que el Estado no sólo es un articulador y un generador de actividades inclusivas; es también, o encarna, la reivindicación de la política. Un Estado un ausente implica retirarse de la idea del “bien común”, con lo cual, por ejemplo, la caída del desarrollo industrial es casi lógica.
—¿Qué va a pasar con el radicalismo?
—El radicalismo necesita un debate profundo interno, diría fundacional. Sin una profunda reflexión no hay posibilidad ni de crecimiento ni de dar cuenta de los problemas reales que sacuden a la sociedad actual. La participación del radicalismo en Cambiemos sólo se puede entender con la posibilidad de ser parte del gobierno. Una mirada muy estrecha e inconducente.
—¿Por qué candidato a senador por Rosario?
—Creemos que falta una renovación el Senado provincial. No está a tono con las necesidades actuales. Creemos que hay una nueva etapa, desde Arriba Rosario buscamos un Senado con y para la gente. Es el momento de trabajar en proyectos para leyes que contemplen las necesidades de nuestra región. Es tiempo de impulsar la educación, el desarrollo productivo y las obras públicas.