El rugby da revancha, a veces tarda un poco más de tiempo en llegar, pero siempre llega. El tucumano Nicolás Sánchez, goleador histórico de Los Pumas, goleador del Mundial de Inglaterra 2015, no tuvo en Japón 2019 un buen desempeño. Lo vivido en tierras niponas, llevó a pensar que sus tiempos en el seleccionado habían terminado, esto dicho por el mismo. Por suerte, el diez se equivocó, por suerte limó asperezas con Ledesma, y para la satisfacción del rugby argentino que lo puede volver a disfrutar.
Hugo Porta puede dormir tranquilo, seguirá siendo el más importante jugador de la historia del rugby argentino, pero su legado, la camiseta número 10 de Los Pumas, tiene al tucumano para defenderla y honrarla.
“Estoy convencido de que la adversidad hace fuerte a los equipos y en nuestra cabeza hoy solo tiene que ser creciendo. Cuando terminó el Mundial pensé que se había terminado mi carrera en Los Pumas. No creía volver a tener esta oportunidad, estar en este estadio con todos los chicos y viviendo lo que vivimos hoy”, expresó Sánchez.
Y además el autor de todos los puntos en el triunfo sobre los All Blacks por 25 a 15, dijo: “Hoy fue un orgullo representar al país. Lo que sentí en los últimos minutos viendo la defensa, la preparación de todo esto, la gente que ha estado en los malos momentos, es increíble. Quiero agradecer a todos los que están cerca nuestro cuando estamos mal”.
En 1985, Hugo Porta marcó 21 puntos, para empatar con Nueva Zelanda, en cancha de Ferro. Ese día se estuvo muy cerca, pero no pudo ser, 35 años después, Argentina logró un resultado con el que se sueña desde hace 44 (el primer duelo fue en 1976).
Sánchez, emuló a Porta, marcó 25 puntos, para que Los Pumas desaten un festejo contenido, lágrimas, abrazos interminables, el tucumano, lejos de adquirir rédito individual, puso al equipo por delante, sabiendo que es uno de los referentes y que se espera mucho de él. Hoy el Cachorro se recibió con honores, hoy Hugo Porta puede estar tranquilo, que todo su esfuerzo por hacer más grande al rugby y contagiar a más chicos por jugar con la ovalada, tiene un sucesor que levantó su legado y lo honra con actuaciones como ante, nada y nada menos, que Nueva Zelanda.