No es oficial, y por lógica no habrá confirmación de ningún tipo, pero la dirigencia leprosa ya tiene en mente un cambio de entrenador y el candidato de todos es Américo Gallego.
Sí, el Tolo, que hasta hace algunos meses no estaba en los planes y ni siquiera entró en la carrera donde finalmente fue elegido Gustavo Raggio, esta vez torció el rumbo y todo indica que será el próximo entrenador de la Lepra.
La dirigencia esperó un poco para tomar la decisión y los siete puntos posclásico (Godoy Cruz, San Lorenzo y Tigre) le habían dado nueva vida a Raggio, a punto tal que se pensó en sostenerlo en el cargo si Newell’s ingresaba a la Sudamericana. Pero la derrota ante Defensa y Justicia, con una pobre imagen en cancha, fue el detonante para que se decidiera avanzar en charlas con el entorno de Américo Gallego.
Si bien los directivos aguardan charlar con Raggio para definir cómo terminar el vínculo, e incluso existe la posibilidad que le propongan seguir en el Parque como ayudante de campo de Gallego o en otra función, lo más probable es que Carozo opte por irse, aunque como él mismo dijo cuando se le consultó sobre el tema en la conferencia de prensa: “No es un momento donde pueda pensar en ese tema”.
¿Qué cambió para que Gallego aparezca como el principal candidato? En primer lugar la dirigencia considera que debe llegar un entrenador que tenga consenso en el hincha para que pueda trabajar tranquilo, y en ese sentido el Tolo va a tener esa ventaja.
Por otra parte, el tan mentado “estilo” impuesto por el Tata Martino, que se defendía a morir dentro y fuera de la cancha, con un 4-3-3 intocable, volvió a tener un semestre flaco en resultados y eso provocó que los propios jugadores aceptaran que se podía cambiar.
Además la dirigencia considera que un técnico de experiencia puede sentir menos presión a la hora de tomar decisiones y la primera medida será apostar a mejorar la preparación física, un punto muy cuestionado en el ciclo Raggio, con el profe Luis Azpiazu en el ojo de las críticas.
Y si bien algunos directivos pensaron nuevamente en Ricardo Gareca y Matías Almeyda, en el caso del Tigre no sería lógico comenzar otra negociación de varias semanas como en el receso anterior, mientras que el Pelado no tendría tanto consenso en la gente.
En cuanto a los jugadores experimentados, que muchas veces se dijo no estaban de acuerdo con la llegada de Gallego, desde la dirigencia creen que no será un problema, en especial con Maxi Rodríguez, quien sin lugar a dudas es la gran figura y capitán del plantel a partir del retiro de Lucas Bernardi.
“Maxi no se va a involucrar en la decisión del entrenador, nunca quiso hacerlo. Y no creemos que se vaya a ir”, le dijo a El Hincha una alta fuente consultada.
Lo cierto es que por ahora Raggio será el entrenador leproso ante Independiente y Lanús, pero más allá del resultado y el ingreso o no a la Sudamericana, la dirigencia ya piensa en el Tolo. Y esta vez no es un cuento Gallego…
Piensa en el Rojo
El plantel leproso trabajó ayer por la mañana con la mente puesta en el cotejo del sábado a las 21.30 ante Independiente que será dirigido por Néstor Pitana.
Por ahora hay pocas precisiones sobre el equipo que visitará al Rojo, aunque no sería raro que Raggio realice algunas variantes, en especial en el mediocampo y la defensa. El único que aparece con una molestia física es Marcos Cáceres, quien fue reemplazado por una molestia ante Arsenal. Pero no habría que descartar la presencia de Iván Silva o Facundo Bustamante en el mediocampo en lugar de Villalba o Víctor Figueroa.
El profe Olivera
Si bien no hay nada cerrado, el Tolo Gallego vendría con el profe Rubén Olivera como preparador físico, alguien que ya trabajó en Newell’s, aunque su último paso no fue el mejor, ya que estuvo en 2011 con Roberto Sensini reemplazando a Hernán Puerta y ese semestre hubo cuestionamientos a su trabajo. Como ayudante sonó el nombre de Rubén Capria, pero son sólo rumores.