Jorgelina, la mamá de Juan Cruz Vitali, llegó a las siete de la tarde a la casa de su prima. Viven cerquita, a una cuadra, en Capitán Bermúdez. Luego de la cena del viernes, los sobrinos acompañaron a Jorgelina a su domicilio, cerca de las 23 horas. Ella vive en Rosario al 200, casi esquina Jujuy, en barrio Centro. Al llegar se sorprendió al encontrar luces encendidas, cuando había dejado todo apagado. La puerta de la reja estaba sin llave, lo mismo que la puerta de ingreso a la cocina. No había ninguna señal de que las aberturas hayan sido violentadas. «Cuando entró al dormitorio se encontró con un desastre. Todo revuelto, todo tirado, todos los cajones abiertos. No se llevaron ni televisor led ni microondas, los electrodomésticos de mayor valor y más fáciles de cargar. Seguramente estuvieron buscando papeles e información», especuló Fernanda Morel, prima de Jorgelina y tía de Juanito, el joven de 23 años asesinado de un tiro en la cabeza tras esquivar un control policial el pasado 12 de mayo, episodio por el cual permanece bajo prisión domiciliaria el ex jefe policial Sergio Di Franco, de la Unidad Regional XVII.
Fernanda descartó que se haya tratado de un robo frustrado modalidad escruche. No encontraron ni puertas ni ventanas violentadas. «Estaban buscando papeles, información», insistió la tía de Juanito Vitali. «Esta gente está hostigando y siguiendo los movimientos de Jorgelina. Creemos que conocen sus horarios: cuándo va, adónde va y a qué hora entra y sale de trabajar. Yo pienso que si anoche mi prima estaba adentro de esa casa, hoy la encontrábamos muerta», manifestó. «A ella ya le arruinaron la vida y anoche más todavía», lamentó en declaraciones a Radio Mix 106.9.
El pasado 28 de agosto, luego de un acuerdo entre la Fiscalía y la defensa encabezada por el penalista Paul Krupnik, le otorgaron la prisión domiciliaria al comisario Di Franco. Se le notificó a la familia de Vitali de la suspensión de la audiencia que estaba prevista para ese día, dijeron desde la oficina de prensa del Ministerio Público de la Acusación.
«Cuando le dieron la prisión domiciliaria a este asesino -refirió Fernanda-, a mi prima le dieron dos opciones en la reunión previa a la última audiencia que fue suspendida: libertad condicional y prisión domiciliaria. Entonces algunos empezaron a hablar de que hubo un arreglo por plata. Juanito tiene dos hijas y aparecieron comentarios de que la mamá había arreglado la muerte de su hijo con plata», dijo.
Según la tía de Juan Cruz, existen dos hipótesis sobre lo ocurrido anoche en el domicilio de Rosario al 200. «O buscaban pruebas y fueron pocos inteligentes porque toda la documentación está bien guardada en cajas de seguridad y en estudios de abogados; o bien buscaban plata sin importarles el dolor de la familia», indicó. «Esto se parece a una guerra», graficó Fernanda.
«Mientras tanto -prosiguió-, seguimos luchando contra un Estado que mantiene a estos policías corruptos y de gatillo fácil. Entonces nos van a seguir poniendo piedras en el camino. Nos hacen volver a aquel día trágico. Acá hay una madre a la que le sacaron todo».
La madre y la tía de Juan Cruz Vitali radicaron la denuncia en la Comisaría 4ª de Capitán Bermúdez. «Llamamos al 911, vinieron del Comando Radioeléctrico y nos llevaron a la delegación. Sacaron fotos de lo que había pasado en la casa de Jorgelina y nos atendieron como corresponde. No todos son policías de gatillo fácil como Sergio Di Franco», concluyó Morel.
Durante la última semana de noviembre finaliza el plazo de prisión domiciliaria de 90 para Di Franco, ex jefe de la división Cuerpos de la UR XVII. En la próxima audiencia las partes esperan tener resultados de las pericias solicitadas.
