Por Santiago Baraldi
“Tenés que guardar esa pancarta o irte afuera; si no te tengo que detener”, le dijo una mujer policía en el hall de los Tribunales provinciales a Marcela Nissoria, familiar de una de las víctimas fatales de la explosión de Salta 2141. La sugerencia fue pronunciada cuando la mujer, en compañía de otras, se presentó a la reunión que la fiscal Graciela Argüelles había coordinado con los responsables de la empresa Litoral Gas. Las mujeres siguieron caminando por la planta baja con pancartas y fotos que recuerdan a sus seres queridos. Nissoria la miró a la agente policial y, desafiante, le dijo: “Deteneme, si te animás, deteneme”.
La prometida reunión fracasó “por falta de espacio”, pero la empresa, en un escueto comunicado que hizo llegar al Palacio de Justicia, señaló que no estaba avisada del encuentro y ofreció a los abogados de los familiares “realizar reuniones con fecha y hora programadas en las instalaciones de la compañía; en un ámbito de entendimiento y respeto; sin manifestaciones, agresiones verbales, físicas, ni pintadas en las instalaciones de Litoral Gas”.
Nissoria, esposa de Hugo Montefusco, fallecido en la explosión, afirmó en diálogo con El Ciudadano que “nos tomaron el pelo” y aseguró que la semana pasada, cuando ocuparon las oficinas de Mitre y San Lorenzo a la espera de algún gerente que los recibiera, se hizo presente luego de siete horas la fiscal Argüello, quien ante los medios de comunicación prometió la reunión que debía haberse concretado ayer.
Sin garantías
“Nos preguntamos: si la Justicia no nos pudo garantizar una reunión, ¿nos garantizará justicia? Nos engañaron como a carmelitas descalzas. Sentimos que hacen lo que quieren, con la Justicia y con las personas. Las promesas, que quedaron registradas por los canales que nos acompañaron, en las que la fiscal nos promete una reunión en Tribunales para hoy (por ayer), ahora nos dicen que no tienen espacio para recibirnos. La Justicia se burla de nosotros tomando compromisos que no cumple, y además los que venimos a reclamar justicia parece que somos los victimarios y no las víctimas”, se desahogó Nissoria.
Desde la Asociación Salta 2141, bregan por una audiencia pública “porque no contamos con el dinero para solicitadas como hace Litoral Gas; queríamos que el público en general y los medios participaran y escucharan, de parte de la Justicia, qué pasó; tienen que explicar qué ocurrió, cuál es la situación de los procesados. Nos dijeron que no es obligatorio, que ellos no están obligados a reunirse. Entonces, lo que interpretamos es que lo del martes pasado fue solo una promesa para que dejemos las instalaciones”.
“Cada que vez que pedimos una respuesta, nos llenan de preguntas… Estamos cansados, enfermos, decepcionados, nos tratan como locos. Tenemos una decepción muy grande con la Justicia”, concluyó Nissoria, quien estuvo acompañada por familiares de Carlos López, Maximiliano Vesco, Santiago Laguia, y Débora Gianángelo, entre otros.
