Un buen punto. Sumar y cortar una racha negra de visitante siempre es positivo. Central hizo un partido correcto en Avellaneda y empató 0-0 con Independiente de manera justa. El equipo de Carlos Tevez tuvo dos ocasiones muy claras para marcar, pero se encontró con una buena tarde de Sebastián Sosa. Además, el Canalla tuvo un sólido funcionamiento de mitad de cancha hacia atrás (más allá de la última de Ferreyra) y terminó con la valla invicta, aunque le faltó algo de peso arriba, más allá de esas dos llegadas, para traerse la victoria a Rosario.
A pesar de no haber sumado de a tres, Central mostró autoridad para jugar fuera del Gigante, algo que no pasaba desde hacía mucho tiempo. Esta vez demostró tener una idea de juego, a pesar de que la debe seguir trabajando, y esto es una buena señal de cara al Clásico del jueves en Arroyito.
Tevez esta vez se inclinó por un 4-4-1-1 para iniciar el encuentro. La idea del entrenador fue ubicar más gente en la mitad de la cancha con la inclusión de Mateo Tanlongo y para ello prescindió de Franco Frías.
El primer tiempo fue de trámite parejo y si bien la primera jugada de riesgo de Central fue recién a los 32 minutos a través de Jhonatan Candia, el Canalla terminó de mejor manera esa etapa inicial. El uruguayo Sosa terminó siendo fundamental para que el descanso encontrara el marcador como al comienzo.
En el amanecer del juego el local tuvo dos ocasiones claras para marcar: una a través de Romero, cuyo remate se fue apenas desviado, y minutos después Pozzo encontró bien parado a Servio. Pero después del primer cuarto de hora Central creció en el partido y, en líneas generales, trató de imponer las condiciones del juego. Más allá de la del ex Huracán, tuvo otra muy clara, pero el cabezazo de Infantino encontró una muy buena respuesta de Sosa.
El Canalla eligió el sector izquierdo para inquietar al Rojo aprovechando el tándem Blanco-Malcorra. Y si bien tuvo esas dos chances para anotar, dejó la sensación de que faltó una referencia en el área, ya que más allá del correcto partido que hizo Candia, está claro que el uruguayo se siente más cómodo como acompañante que de centrodelantero.
La segunda parte comenzó muy cortada. Una muestra de ello fue que en pocos minutos el juez del partido amonestó a cuatro jugadores. Tevez tuvo que mover el banco de manera obligada ya que debió reemplazar a Candia (ingresó Veliz) por lesión tras un duro cruce de Vigo que el árbitro ni siquiera cobró falta.
Antes de los 30 y cuando el partido no encontraba emociones, el Apache mandó a la cancha a Frías y modificó el esquema al 4-4-2. Pero a pesar del cambio táctico el Canalla no encontró profundidad, claro que el rival tampoco, ya que solamente pateó al arco en una de las últimas jugadas del partido y de casualidad.
Central se volvió con un punto a Rosario. Cosas positivas de mitad de cancha hacia atrás y el cuerpo técnico se trajo tarea para hacer en la parte ofensiva. Lo que viene será otra historia. El Clásico ante Newell’s marcará un antes y un después en esta primer tercio del campeonato, pero no hay dudas de que llega al partido más importante del año con una cara diferente a la que tenía hace apenas dos semanas atrás.