El candidato presidencial del Peronismo Federal, Felipe Solá, afirmó hoy que «aún no se ve el gran frente innovador que está reclamando la gente» y destacó que un eventual acuerdo opositor debería incluir la posibilidad de que el próximo presidente sea de un partido político, el jefe de Gabinete de otro y los ministros «variados».
«El reclamo de unidad en la oposición es genuino. La gente dice: únanse, muéstrenme un candidato, no me dejen sólo a Cristina, denme la posibilidad de elegir . Veo eso y por eso sigo adelante», sostuvo Solá durante un encuentro con dirigentes de su sector de la Primera Sección bonaerense.
En ese sentido, destacó que la elección presidencial «es una carrera para atrás, a ver quién se baja último. Yo no pienso bajarme».
Y remarcó que «si no tenemos una actitud de amplia unidad y de presentar algo muy novedoso, los argentinos no van a cambiar».
Por esa razón, el precandidato que decidió no participar de las malogradas internas del PF y competir directamente el 14 de agosto propuso «armar un gobierno plural, con un presidente de un color político que se proponga la unidad nacional y un jefe de Gabinete de otro partido que sea una especie de primer ministro. A su vez, los ministros deben ser variados y tiene que haber un ida y vuelta con el parlamento».
Solá señaló, de todas maneras, que «hay varios opositores que pensamos distinto» y advirtió que «hay que sumar sobre la base de un acuerdo programático, porque sumar por sumar, no sirve».