El actual diputado nacional de Juntos por el Cambio José Nuñez lidera la lista de la precandidatos para integrar la Cámara baja que en la interna de ese espacio político responde a Patricia Bullrich. «El Negro», que aspira a su tercer período consecutivo como diputado nacional, enfrentará este domingo al actual diputado provincial Juan Cruz Cándido, que representa al larretismo. Con una vida previa en el sector privado, primero en los servicios financieros y luego en diferentes actividades agropecuarias, Nuñez se incorporó a la política en 2009, pero lo hizo en Capital Federal, como funcionario del gobierno de Mauricio Macri. En 2015 volvió a la provincia para militar la candidatura a gobernador de Miguel del Sel y en ese mismo año fue elegido como diputado por Santa Fe, cargo en el que lleva casi ocho años. En la previa de la elección presidencial, mira de reojo la reciente elección provincial y se entusiasma con «tener al candidato a gobernador más votado de la historia». Dice no tener modelos ideológicos rígidos y cree «en los que hacen las cosas bien». Aspira a conseguir seis bancas de las diez que se renuevan en octubre, y para eso considera que «la suma de JxC va a ser muy potente en la provincia».
—¿Qué balance hace de sus ocho años como diputado nacional?
—En el primer periodo teníamos mucha debilidad parlamentaria. Teníamos 85 legisladores y se necesitan 129 para aprobar cualquier ley, para dar quórum. Y no llegábamos a un tercio de los senadores. Hoy estamos mucho mejor parados, porque tuvimos un fuerte respaldo en el 2017, conseguimos cinco bancas, contra las tres de 2015. En el 2019 y en el 2021 volvimos a ratificar las cinco bancas. Y en esta elección vamos a ir por seis. Porque creemos que es posible, y además porque el próximo presidente necesita no solamente ser presidente, sino tener la mayor cantidad de legisladores posible para poder hacer las transformaciones profundas que necesita la Argentina.
—¿Esa proyección está basada en el resultado de las Paso?
—Nosotros estamos muy contentos por lo que pasó con las Paso provinciales, porque entre Mónica Fein, que aprovecho a felicitarla, Caro Losada, que también aprovecho a felicitarla y Maximiliano Pullaro, que lo felicito por dos, por haber sido el que ganó esa contienda, juntos, con idas y vueltas, con subida de tono, con bajada de tono, construyeron casi un millón de votos. Nunca en la provincia Santa Fe desde que existen las Paso ningún frente electoral logró conseguir más de 600.000 votos. Eso nos da obviamente una alegría por un lado, por conseguir semejante respaldo. Y por otro lado nos pone en un nivel o en un grado alto de responsabilidad, porque hay que administrar semejante triunfo. Y también nos permite vislumbrar que podemos llegar a tener en nuestro frente al candidato a gobernador, si todos hacemos lo que tenemos que hacer, más votado de la historia de la provincia de Santa Fe. Creo que eso lo vamos a lograr, pero no es suficiente. También necesitamos que los ciudadanos que confiaron en nuestro espacio y que votaron a Pullaro, y los que van a votar ahora en la final, porque el verdadero partido es el 10 de septiembre, que no solamente voten por Maximiliano Pullaro, que también la voten a Clara García, que encabeza la lista de diputados provinciales, porque necesitamos que el gobernador tenga la Cámara de Diputados con el poder que tenemos que tener para hacer las transformaciones que tenemos que hacer. Y también les pido a cada uno de los departamentos, como el de Rosario, como el departamento de La Capital, como el departamento San Martín, como el departamento Belgrano, como el departamento San Lorenzo, como el departamento Castellanos, como el departamento San Javier, donde la suma estuvo muy cerca o estuvo por encima del oficialismo, que también hagamos el esfuerzo de votarle al senador que sea el que representa a Unidos para cambiar Santa Fe para que el gobernador deje de ser rehén de las cámaras adversas, porque ningún gobernador desde que se implementó la boleta única tuvo poder. En el mejor de los casos te negocian todo, que a veces algunas cosas son bien negociadas y otras no. Y en el caso intermedio te ponen obstáculos y en el peor de los casos te extorsionan. Entonces tenemos que terminar con eso si queremos que el gobernador que elegimos haga las transformaciones que necesita nuestra provincia, que son muchas, que son urgentes y que son profundas.
—¿Cuáles son esas reformas?
—Un caso es la educación, que en la provincia es una catástrofe. Veinticuatro chicos solamente de cada 100 terminan el secundario en tiempo y forma. Y de esos 24, el 50% no comprende texto. No interpreta un proceso productivo, no sortea una entrevista laboral. ¿Qué futuro tiene? Tenemos que declarar a la educación como un servicio esencial. Tenemos que garantizarle a los chicos que son el futuro de la Argentina, que tengan 180 días o 190 como pretendemos a nivel nacional, 190 días de clase de calidad y que el derecho de los trabajadores no esté por encima del derecho de los alumnos. Lo más importante que tenemos son nuestros chicos y le tenemos que dar las herramientas para que se puedan defender en el futuro. No puede ser que hoy tengamos el éxodo más grande de la historia de talentos y el que no se fue está mirando para irse.
Yo el otro día me encontré con un señor, en esta recorrida que estoy haciendo, de 78 años, y me preguntó si yo era el candidato de Bullrich. Le dije que sí y me dijo “mire diputado, el kirchnerismo ha quebrado la Argentina en materia económica, ha destruido y pulverizado la educación, la quisieron transformar en adoctrinamiento. Nos han abandonado en materia de seguridad, nos matan como moscas. Lo que no les voy a perdonar -este señor decía- es que me haya quebrado mi familia, porque hoy tengo un nieto en Canadá, el otro viviendo en Australia y los cuatro que quedan acá están mirando también con buenos ojos irse y los domingos mi casa es una tristeza». Nosotros estamos acostumbrados a que los domingos comemos con nuestra familia, que en la semana vamos al club, que un día a la semana viene un nieto a comer con nosotros. Estamos acostumbrados a vivir en familia y no le voy a perdonar a este gobierno, que se empecinó en querer transformarnos en Venezuela y no lo pudo lograr gracias a que Juntos por el Cambio no se desunió siendo oposición. Porque si no se hubieran llevado por delante la Justicia, se hubiesen llevado por delante la propiedad privada, y se hubiesen llevado por delante la división de poderes. Entonces a los argentinos y a los santafesinos en particular les digo que nosotros nos hemos mantenido unidos, con nuestras diferencias, porque las tenemos, porque tenemos orígenes diferentes, pero nunca hemos defraudado al votante de Juntos por el Cambio, porque lo que le prometimos no era tarea sencilla y lo logramos. No solamente para trabajar, también para ayudar. Porque cuando el gobierno de Alberto Fernández necesitó como herramienta la aprobación de la Cámara de Diputados para poder renegociar los acuerdos con el Fondo Monetario Internacional su presidente del bloque en aquel entonces, Máximo Kirchner, junto con su grupito radicalizado de La Cámpora, le sacó el apoyo. Y si Juntos por el Cambio no le votaba la Argentina entraba en default. ¿Sabés lo que significa que Argentina entra en default? Mucho más sufrimiento para los argentinos. Y nosotros pusimos por delante el bien general. Para nosotros no existe el cuanto peor mejor. Nosotros queremos que el gobierno le vaya bien y por eso tomamos como una irresponsabilidad que Sergio Massa, el superministro de Economía con los índices de inflación más alto de la historia desde la década del 90 a esta parte, sea candidato. Tendría que estar enfocado en el problema de resolverlo, porque ¿cómo le promete a los argentinos que va a bajar la inflación si hoy que está en el lugar no lo hace? ¡Si él hace cuatro años que gobierna junto con Cristina Fernández de Kirchner y con Alberto Fernández! Esperamos en base al resultado de las provinciales, por supuesto, la misma contundencia en cuanto a que los argentinos, en este caso los santafesinos, tienen claro que quieren cambiar, que quieren salir de esta decadencia. Encontraron para las provinciales a Unidos para cambiar Santa Fe y en la nacionales, no tengo dudas que la suma de Juntos por el Cambio va a ser muy potente en nuestra provincia.
—¿Cuál es el diferencial de Patricia en relación a Larreta? ¿Es sólo una cuestión de velocidad en los cambios?
—Lo primero que veo es la situación actual del país. Patricia no se tuvo que adaptar a la situación. La situación se adaptó a Patricia. Necesita un liderazgo fuerte, un liderazgo con coraje, necesita una visión nítida de qué es lo que queremos los argentinos. Y en cuanto a la velocidad queremos la mayor velocidad posible, porque cada día tenemos menos tiempo. Los argentinos están cansados, la están pasando mal, Y la diferencia es que Rodríguez Larreta, al cual yo respeto mucho, lo aclaro, y es un gran dirigente de JxC, pero si él pretende acordar con los Sergio Massa de la vida, si él pretende acordar con los Moyano de la vida, probablemente evite algunos conflictos, pero difícilmente resuelva los problemas de fondo, porque para que estos señores dialoguen contigo no le tenés que tocar sus privilegios. Patricia está dispuesta a romper los privilegios que nos llevaron a la decadencia que tenemos hoy. Nosotros tenemos el equipo, tenemos el plan, el qué y el cómo, lo que discutimos el domingo es quién, y Patricia representa algo muy importante: una visión nítida, el coraje, la valentía y la firmeza para conducir el cambio que la Argentina necesita. Pero además tiene algo que todos los argentinos reclamamos, exigimos y esperamos, que es tener honestidad y tener austeridad. Patricia fue clara, ella quiere que su gobierno sea recordado como el gobierno que sacó a la Argentina de esta decadencia, pero además quiere que se recuerde como el gobierno más austero y más transparente que haya tenido la Argentina en toda su historia.
