«No voy a mentir. Se está volviendo más duro, cada día es más duro, pero así son las cosas», dijo el intérprete, quien reconoció que no se imagina vivir con esa enfermedad hasta que tenga 80 años.
En una entrevista transmitida por la cadena CBS este domingo, Fox, contó cómo fue vivir con esta enfermedad incurable desde que fue diagnosticado en 1991, cuando sólo tenía 29 años y era una de las grandes estrellas de Hollywood.
En ese reportaje Fox también admitió que la enfermedad está «llamando a la puerta con fuerza» y que los temblores son cada vez más intensos, lo que aumenta el riesgo de caídas y fracturas.
El actor explicó que sufrió fracturas en ambos brazos, en un codo, una mano y en la cara debido a las caídas y además, tuvo una cirugía en la columna vertebral debido a un tumor que resultó ser benigno, pero que afectó su capacidad para caminar.
«Caerse es lo que te mata cuando tienes Parkinson. Es caerte, aspirar comida, tener neumonía. Todas esas formas sutiles en las que la enfermedad te atrapa. Uno no muere de Parkinson, muere con Parkinson. Sí he estado pensando en la mortalidad y en todo esto. Y no voy a llegar a los 80 años», afirmó.
Sin embargo, Fox se mostró esperanzado por la posibilidad de que la fundación que creó en el año 2000, pueda lograr pronto una cura total o parcial para la dolencia que padece.