La Municipalidad tomará posesión nuevamente, en los próximos días, del emblemático lugar donde estuvo emplazado el resto bar Espacio Once –más recordado por la presencia del histórico y tradicional Munich– en el parque Urquiza.
Según adelantaron a este diario desde el Palacio de los Leones, con la “entrega de las llaves” del último concesionario –quien al no resultarle rentable el emprendimiento, abandonó la explotación– se procederá a armar en breve una nueva convocatoria para que durante nueve meses algún particular explote comercialmente el local hasta tanto se diseñe un nuevo llamado a licitación, cuyas condiciones serán estudiadas por profesionales especializados en la cuestión. Además, se prevé la realización de reformas en el predio, enclavado en pleno barrio Martin, para aprovechar de manera integral uno de los espacios más bonitos, y con una inmejorable vista al río, que tiene Rosario para disfrutar de la gastronomía local.
La directora general de Gestión y Control de Concesiones Municipales, Hilda Gontín, señaló que ya se rescindió el contrato de concesión con el último locatario, por lo que el municipio tomaría posesión del lugar, ubicado en avenida de la Libertad al 200, la semana próxima. “Tenemos que ver en qué estado están las instalaciones. La idea es realizar una convocatoria lo antes posible para que alguien explote comercialmente el lugar por un lapso de nueve meses. Lo que buscamos es que el predio esté funcionando para este verano, por su importancia como centro gastronómico para la zona y también por lo importantes que resultan los baños públicos que posee. Cuando empieza el calor, esa zona se llena de gente que sale a caminar o a realizar ejercicios y la presencia de los sanitarios se convierte en algo de suma importancia”, destacó.
Una vez entregado el lugar a quien lo use comercialmente durante la cantidad de tiempo estipulada para esta primera etapa por la Municipalidad, se procederá a realizar un estudio para ver qué refacciones pueden hacerse con el fin de mejorar su infraestructura para luego sí hacer un llamado a licitación para su explotación durante lapsos que pueden ir desde los siete hasta más de diez años.
“La cantidad de tiempo y esas cuestiones se definirán dependiendo de la inversión que haga falta hacer. Hay que ver qué desembolso es necesario para las reformas y a partir de eso evaluaremos cuántos años se necesitan para poder recuperar lo invertido”, afirmó.
Cabe recordar que a raíz de que el último concesionario abandonó hace unos meses la explotación del lugar agobiado por los costos para mantenerlo, el predio quedó en virtual estado de abandono y se convirtió en poco tiempo en refugio de personas que se acercaron para cobijarse del frío y las inclemencias del tiempo, especialmente durante las noches. Esto provocó no pocas quejas de los vecinos del lugar, quienes vieron cómo día a día la situación de descuido iba empeorando. Desde la Municipalidad se defendieron en su momento aclarando que el edificio no estaba abandonado, y aclararon que dejaron vigilando en la zona a personal de seguridad contratado exclusivamente.
“El último concesionario cerró las puertas del restobar porque según nos manifestó la ecuación económica no le cerraba por problemas internos y de gerenciamiento. Este empresario presentó un documento en el que aduce que el negocio no reportaba las ganancias esperadas, entonces nos comunicó que dejaba la concesión, cuando vaciara el lugar. A partir de entonces podremos disponer del inmueble y abriremos un llamado para nuevos interesados. Es por eso que ahora nosotros queremos reactivarlo lo antes posible porque tiene una ubicación privilegiada y esa zona en verano se llena de gente y puede ser un lugar muy tentador para disfrutarlo”, concluyó la funcionaria municipal.