El jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, le advirtió ayer a los productores de soja que “no especulen con maniobras de carácter financiero”, tras señalar que “la tendencia en el precio de liquidación” de la oleaginosa es “decreciente”, mientras que los dirigentes de entidades agropecuarias negaron la especulación.
“La tendencia en el precio de liquidación de soja es decreciente. Que no especulen respecto a maniobras de carácter financiero”, había enfatizado Capitanich.
Durante una conferencia de prensa que ofreció en Casa de Gobierno, el funcionario apuntó contra “empresas cerealeras” por presuntas “maniobras”.
El jefe de Gabinete se hizo eco de versiones periodísticas que aseguraron que los productores y acopiadores retienen soja por unos 6.370 millones de dólares, de acuerdo con los últimos datos disponibles.
Esas cifras indican que quedan sin vender 11,5 millones de toneladas de la cosecha sojera 2012/13 y el valor FOB oficial se ubica en 544 dólares la tonelada para el poroto sin procesar.
Los datos de soja retenida se desprenden de las ventas que la exportación y la industria informaron al 20 de noviembre a la dirección de Mercados Agropecuarios del Ministerio de Agricultura, y de la producción final, que se ubicó en 49,5 millones de toneladas.
En tanto, el presidente de Federación Agraria Argentina (FAA), Eduardo Buzzi, salió al cruce de los dichos de Capitanich y advirtió que “los productores que tienen alguna reserva” de soja “la mantienen en defensa propia”.
“Capitanich empieza a tener un síndrome de incontinencia verbal. Está bueno que haga declaraciones todas las mañanas, nos recuerda un viejo funcionario de la época de los ‘90, pero no está bien que diga macanas. Los sojeros no están especulando contra nada, no son devaluacionistas ni cosas por el estilo”, dijo.
Para Buzzi, el gobierno nacional “debe generar la certidumbre para que esa liquidez sojera vaya a parar, como lo ha sido durante varios años, a la construcción, a los negocios más diversos, a la maquinaria agrícola, a las camionetas”.
En tanto, el titular de la Sociedad Rural Argentina (SRA), Luis Etchevehere, consignó ayer que los productores de soja no están vendiendo “para defenderse de la inflación”.
Etchevehere manifestó que la suba constante de precios “hace que el productor se resguarde en las semillas para afrontar los gastos para la futura siembra, porque ese grano va a tener relación con el costo de los insumos que deberá comprar”.
En un reciente informe, el estudio Bein manejó números más moderados y afirmó que los productores retienen entre 3.500 y 4.000 millones de dólares. Esto ocurre mientras la devaluación en lo que va del año tuvo una depreciación del peso de 24,7 por ciento al ritmo de la inflación que estiman las consultoras privadas.
José Frogone, analista del mercado de granos, consideró que el productor retiene soja porque a falta de alternativas de inversión apuesta al valor de su cosecha en dólares. “El precio de la soja está estable en dólares y la devaluación se acelera, por lo que sino hay aplicación para el producto de la venta, se vende sólo cuando se necesita efectivo”, precisó.
“Es difícil que los precios suban”, dice la BCR
El director de Informaciones y Estudios Económicos de la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR), Julio Calzada, afirmó ayer que “con la muy buena producción de soja” que se espera para la actual campaña a nivel mundial “es muy difícil que los precios tiendan a subir”.
De todos modos aclaró que “es muy difícil hacer futurología” respecto de los valores, porque remarcó que “hay mucho componente especulativo” en la conformación de las cotizaciones.
También explicó que si bien la cantidad de soja disponible para la venta por los productores está en unas 12,2 millones de toneladas, probablemente las ventas de acá a fin de año estarán en el orden de los 8 millones si se tiene en cuenta que en la última campaña quedó un stock remanente de 4,4 millones.
“El de granos es un mercado en el que inciden por un lado la producción y el nivel de exportación, pero también hay un componente altamente especulativo”, advirtió Calzada a Télam.
De todos modos señaló: “Cuando uno mira la actual campaña, en que a nivel mundial se estaría ante una producción 280 millones de toneladas de soja, contra los 235 millones de los últimos años, con récord en Estados Unidos, Brasil y Argentina, se puede considerar que va a ser muy buena”.
“Y con una muy buena producción es difícil que los precios tiendan a subir”, evaluó el analista, quien no obstante insistió con que en la cotización de la oleaginosa “hay componentes especulativos de fondos de inversión ligados a mercados financieros, por lo cual no es posible hacer futurología”.
En otro orden, afirmó que la oferta de soja disponible ronda los “12,2 millones de toneladas”. “La producción 2012/13 fue de 49,3 millones de toneladas, a las cuales si se agrega el remanente de la anterior, dan 53,7 millones”, precisó Calzada.
El gobierno descartó exceptuar al aguinaldo del pago de Ganacias
El jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, descartó ayer que el gobierno vaya a realizar excepciones en el pago del impuesto a las Ganancias sobre el medio aguinaldo de fin de año, al advertir que “ya se tomaron las medidas que impactan positivamente sobre los trabajadores”. Consultado sobre una posible excepción en el pago de este impuesto, el funcionario indicó que “precisamente lo que hizo este gobierno es impulsar un sistema propositivo y positivo”. Y agregó: “Ya se tomaron las medidas que impactan positivamente en cada uno de los trabajadores”.
Luego de las elecciones legislativas de agosto, el gobierno acordó subir el piso de Ganancias, pero algunos gremios especulaban con la posibilidad de otra medida que favorezca frente a este tributo.
Durante una conferencia de prensa en la Casa de Gobierno, Capitanich reiteró que el Ejecutivo está trabajando “sobre un análisis de la cadena de valor, que es distinto que sólo acordar con los supermercados o las grandes cadenas” para poder ejercer un control sobre los precios.
El funcionario expresó que “la política impulsada por el gobierno después del 11 de agosto, a partir de la convocatoria a empresarios y trabajadores por parte de la presidenta (Cristina Fernández de Kirchner), se ha establecido claramente desde el punto de vista del impuesto a las Ganancias”.
“Por lo tanto, ha sido una actitud positiva, esto es lograr que el impacto del impuesto a las Ganancias no perjudique a los trabajadores”, refirió el ministro, respecto de este gravamen. El viernes pasado, Capitanich también había descartado pagar un bono de fin de año o plus extra a los trabajadores y jubilados.
