De la mano de Brasil y su política de mediano plazo para la Hidrovía: el río Paraná verá un tránsito fluvial creciente que, en particular, impactará sobre la región del Gran Rosario y sus puertos. Es la conclusión de un análisis encargado por la Bolsa de Comercio de Rosario que realizó el economista Raúl Hermida.
Brasil proyecta para el 2030 despachar 120,2 millones de toneladas de commodities –grano, mineral de hierro y manganeso– por sus 8 sistemas hidroviarios. Hermida estimó que con estos volúmenes que proyecta Brasil saldrían al exterior por el Río Paraguay cerca de 20,4 millones de toneladas, de las cuales 5,9 millones corresponderían a maíz y soja de la zona de Mato Grosso y Mato Grosso do Sul. Esta mercadería, especula, seguramente llegará en buena medida al Gran Rosario y Nueva Palmira, en Uruguay.
«En el caso de los despachos asignados por el modelo a la Hidrovía Paraná-Paraguay (HPP), gran parte de la carga saldría por Puerto Cáceres (88%) reflejando claramente la dificultad de acceso por vía carretera al Puerto Corumbá debido al Pantanal, fácilmente comprobable por la trayectoria que siguen las rutas desde los lugares de producción», expresó el analista. .
En tanto, la habilitación del tramo Cáceres-Corumbá en la Hidrovía Paraná- Paraguay requeriría más de 1.000 millones de dólares de inversión, «lo cual implica todo un desafío», explicó el economista su perspectiva.
La Hidrovía es un sistema hidroviario de aproximadamente 7.000 km de extensión que abarca territorio argentino, brasileño, paraguayo, uruguayo y boliviano. Específicamente, la Hidrovía Paraguay-Paraná es una de las vías navegables naturales de mayor longitud del planeta: 3.442 km desde Puerto Cáceres (Brasil) a Nueva Palmira (Uruguay). También, es un eje conflictivo por la hegemonía que ejerce el complejo sojero (granos y su procesamiento), y en menor medida minero o de combustibles, respecto de su diseño y alteraciones. El mayor tráfico de buques, que a la vez son de mayor porte, produce un impacto sobre las riberas por el oleaje y en la flora y fauna del río y el humedal que lo incluye por una serie de efectos contaminantes. El dragado a mayor profundidad, a la vez, aumenta la velocidad del agua y acelera la erosión.
La Cuenca de la hidrovía conforma un gran ecosistema, que incluye el Pantanal brasileño, considerado área crítica de biodiversidad de importancia internacional y regualador hídrico de todo el sistema.
«Los cinco países (entre los que se encuentra la Argentina) que utilizan la HPP deberían hacer un especial esfuerzo para solucionar los numerosos problemas administrativos, operativos y de coordinación a fin de mejorar el entorno de inversiones», recomendó el especialista contratado por la Bolsa de Rosario.
En los últimos años, Brasil está desarrollando una importante infraestructura logística en el área de influencia de los puertos del denominado Arco Norte, con un significativo beneficio para sus actividades agrícolas. En abril de 2014, se inauguró la primera terminal fluvial destinada al transporte de granos en Miritituba (Itaituba-PA) sobre la margen derecha del río Tapajós, que junto a la carga en Porto Velho (RO) en el río Madeira y la de los puertos en Itacoatiara (MA) y Santarem (PA), ambos con capacidad de recibir buques Panamax, le otorgó un fuerte impulso a las hidrovías de la cuenca del Amazonas.
El complejo de los puertos del Arco Norte, que además incluye como principales terminales marítimas a Vila do Conde (Barcarena- PA), Itaqui (MA) y Salvador (BA), mostró entre los años 2011 y 2016 un aumento en la carga de maíz de un 174,8% y del 88,5% en el caso del complejo sojero.