No seduce a la vista, pero rinde en los números. El Newell’s de Américo Gallego sigue dando que hablar y hay cuestionamientos al estilo de juego fuera e incluso dentro de la cancha, pero el Tolo tiene su mejor defensa a la hora de sacar cuentas: el equipo suma 10 puntos y está en la zona alta de la tabla, igualando incluso el arranque del equipo campeón del Tata Martino en el Torneo Final 2013.
Obviamente el nuevo formato de torneo de 30 equipos a una sola rueda no permite sacar conclusiones tan terminantes cuando apenas van cinco jornadas, pero la realidad de los números indica que Newell’s transita por el camino correcto si quiere pelear el título, o al menos estar en los puestos de Copa Libertadores (del primero al sexto).
Por lógicas razones tampoco se puede hacer una comparación exacta entre dos torneos distintos, ya que los rivales son otros y la equiparación no siempre resulta correcta. Pero si se toma en cuenta los inicios desde el Clausura 2012, primer torneo con el Tata Martino en el banco, este arranque de Gallego se equipara a los mejores inicios de los últimos tres años.
El ciclo Gallego acumula 10 puntos en los primeros cinco partidos, con una efectividad del 67 por ciento. Sus detractores podrán argumentar que sus tres victorias fueron frente a equipos ascendidos (Aldosivi, Crucero del Norte y Sarmiento) que todavía no pudieron ganar en el torneo. Pero en defensa del Tolo se puede afirmar que también es un mérito sumar de a tres cuando el partido reclama una victoria, algo que en el fútbol no siempre sucede.
En el Torneo Final 2013, donde Newell’s se coronó campeón, el inicio había sido similar en los puntos, aunque con victorias ante Independiente, Belgrano y Estudiantes, rivales de mayor jerarquía.
¿Qué pasa si se compara este inicio al del Newell’s campeón del Apertura 2004? Aquel equipo de Gallego tuvo un arranque más complicado, con 8 puntos en las primeras cinco fechas, pero sumaba una victoria de visitante en el clásico, que anímicamente sumó más que los tres puntos en la tabla.
Otra crítica que se le hace al conjunto leproso es la mezquindad futbolística que a veces muestra en la cancha, incluso ante rivales de menor talla. El ingreso de Orzán por Figueroa a los 12 minutos del complemento en el cotejo ante Crucero para armar un esquema 4-4-2, o la entrada del propio Orzán por Castro y Paz por Figueroa para aguantar el resultado ante Sarmiento muestran claramente que el Tolo por ahora prioriza el resultado sin importar demasiado las formas. Y mientras los números respalden, las críticas pasarán a un segundo plano.
Claro que el torneo es largo y en el camino aparecerán rivales más exigentes que obligarán a mejorar desde lo futbolístico. Como ejemplo, el equipo campeón de Martino derrotó en el Final 2013 a Independiente, Racing, River, Boca y San Lorenzo, los denominados grandes, incluso también les ganó a Vélez y Estudiantes. Por ahora esa es la materia pendiente del Tolo, que cayó ante el Rojo e igualó con el Fortín.
En cuanto al jugar bien, en realidad vistoso, será difícil que el hincha leproso aplauda de pie al equipo por una producción de lujo, como sucedió reiteradas veces en el ciclo de Martino, pero como dijo Maxi “el Tata ya no está” y a la luz de lo que sucedió en los dos últimos torneos, donde Newell’s apenas sumó 25 puntos con Berti y Raggio y deambuló en la parte media de la tabla, priorizar el resultado como hace el Tolo no parece una mala idea.
Y la presencia de Maxi, Figueroa, Alexis Castro, el pibe Tevez y Nacho Scocco permite pensar que habrá momentos de buen fútbol. Los 7 goles en 5 partidos no es una mala cosecha en la red rival y está por encima del promedio de los últimos torneos.
Cambiar el paladar del hincha leproso resulta complicado, pero a Gallego poco le importa por ahora el gusto de la gente y apuesta a sumar puntos. Una política que irá ganando adeptos si el equipo se mantiene en lo alto de la tabla.
Bernardello, duda en el inicio
El plantel rojinegro entrenó ayer por la tarde en Bella Vista con la mira puesta en el partido ante Quilmes y el único futbolista que no trabajó en campo fue Hernán Bernardello, quien aparece en este inicio de semana como la única duda que podría tener Gallego a la hora de repetir por cuarta vez consecutiva la misma alineación.
El Cabezón estuvo en el vestuario con trabajos de kinesiología debido a una sobrecarga en el isquiosural de la pierna derecha y no realizó trabajos regenerativos como el resto de los que jugaron ante Sarmiento. Incluso Hernán Villalba y Alexis Nicolás Castro, quienes también terminaron con molestias musculares en Junín, ayer trabajaron con normalidad.
Otro que se sumó al grupo es Mauricio Tevez, quien estuvo afuera por un edema en el isquiotibial. Y la buena noticia para el Tolo es que en el trabajo de fútbol reducido estuvieron Federico Fattori, Diego Mateo y Ezequiel Ponce.
Juega la reserva, sin Mateo
Juega la reserva, aunque Diego Mateo no estará en Junín como sí iba a suceder el sábado pasado cuando el partido preliminar entre Sarmiento y Newell’s se suspendió por lluvia.
Hoy a las 16 se jugará en Junín el partido postergado de reserva entre Sarmiento y Newell’s, pero Pomelo no sería de la partida y su regreso oficial a las canchas se postergaría hasta el viernes cuando el mediocampista seguramente juegue en reserva en el preliminar ante Quilmes que se disputará en el Coloso.
La Lepra alistaría a Luciano Pocrnjic; Franco Escobar, Stefano Callegaris, Jonathan Valle y Leonel Ferroni; Jalil Elías, Denis Rodríguez y Lorenzo Faravelli; Juan Ignacio Vieyra; Leandro Figueroa y Héctor Fértoli.
La idea es que Mateo juegue un par de partidos en reserva para ganar ritmo de fútbol, y luego, si el cuerpo técnico lo ve bien, tenerlo en cuenta para el banco.
Viernes a las 20.30
El partido del próximo viernes entre Newell’s y Quilmes en el Coloso Marcelo Bielsa ya tiene hora: 20.30. Así lo confirmó ayer la AFA, que además determinó que Mariano González y Diego Ceballos serán los árbitros que esta tarde ingresarán en el sorteo para dirigir el partido entre leprosos y cerveceros.