“No voy a necesitar más que dos palabras: es falso”, afirmó ayer el presidente del gobierno español Mariano Rajoy ante la cúpula del Partido Popular (PP) reunida en la sede central de la calle Génova de Madrid. “Nunca he recibido ni he repartido dinero en negro en este partido ni en otra parte”, subrayó, al referirse a sus pares –no se permitió a los periodistas preguntar– sobre los documentos manuscritos de la “contabilidad B” del PP publicados esta semana por el diario español El País en los que aparece como receptor de más de 25.000 euros anuales.
Tras calificar de “infamias” esas informaciones, el jefe del Ejecutivo español anunció que la próxima semana publicará su declaración de renta y patrimonio en la página web de La Moncloa, la casa de gobierno en Madrid.
“No tengo nada que ocultar, no temo a la verdad”, aseguró. En el momento más difícil de su carrera política, porque se puso en duda su honestidad, Rajoy recurrió a la teoría de la conspiración.
“Si alguien piensa que por el acoso voy a abandonar la tarea que los españoles me han encomendado se equivocan”, remarcó. “Si alguien piensa que se nos puede amedrentar con técnicas de agitación se equivocan. Este partido se va a defender”, advirtió.
En ese sentido, Rajoy adelantó que su partido “no se quedará con los brazos cruzados ante estos ataques, que pretenden crear una situación de zozobra e inestabilidad en un momento complicado” para España.
El caso de corrupción del ex tesorero del PP Luis Bárcenas se convirtió en una amenaza para el Ejecutivo español tras revelarse documentos sobre el pago de sobresueldos a la cúpula del PP, incluidos Rajoy y su secretaria general, María Dolores de Cospedal.
Bárcenas está procesado por evasión fiscal en el marco del famoso caso Gürtel, la trama de corrupción destapada en 2009 que pagaba comisiones al PP a cambio de contratos públicos, principalmente en las regiones de Madrid y Valencia, gobernadas por el PP.
Hace dos semanas, la Justicia española descubrió que Bárcenas tenía cuentas en Suiza, donde acumuló hasta 22 millones de euros, presuntamente procedentes de la trama corrupta. Se sospechaba que había regularizado más de 10 millones con la amnistía fiscal decretada por el gobierno de Rajoy en 2012, y él mismo lo confirmó hace unos días ante la Justicia.
Luego de conocerse las cuentas del ex tesorero en el país helvético, saltó a la luz el caso de pago de sobresueldos, supuestamente con dinero que procede de donaciones de empresarios. La estructura excedería la trama Gürtel.
De acuerdo con los fragmentos de las cuentas en negro de Bárcenas publicadas el 70 por ciento de los ingresos registrados como donativos vulneraron la ley de financiación de partidos políticos.
“Si me interesara el dinero, lo hubiera tenido como registrador de la propiedad. Sé ganarme la vida. No he venido a ganar dinero, vine perdiendo dinero. Para mí no es lo más importante. Aconsejo pues a quien pretenda desanimarme que no se canse. Soy responsable de lo que hago, no de lo que se diga. Estoy en la política porque quiero cambiar las cosas”, se defendió Rajoy.
«La sombra de un indicio manipulado no puede servir para que cualquier español pierda la presunción de inocencia. En caso contrario, acabaremos viviendo en un país inhabitable. No lo deseo para nosotros, para nuestros hijos ni para nadie”, añadió.